Capítulo 22

42 2 0
                                    

Alex

No estaba de acuerdo en que Vanessa fuera sola a casa de Ana, no es porque no confiara en ella, es qué el mundo es un lugar peligroso y más para una chica, siempre existen los idiotas que tratan de aprovecharse de las chicas.

Me tuve que resignar y dejarla ir, en cuanto llegue a mi casa, subí a mi habitación, mis padres no habían llegado del trabajo, seguí trabajando en mi historia, por ahora aún los protagonistas seguían sin darse cuenta de lo que sentía el uno por el otro. Lo gracioso de cuando lees un libro, y tiene romance es que dices, "Ey, amigo, date cuenta que estás enamorado, dejate de idioteces que la vas a perder", pero cuando nos pasa a nosotros, estamos como los protagonistas, no sabemos que está pasando en realidad y algunas veces perdemos la chica de nuestros sueños.

Seguí escribiendo un poco más, hasta que escuché el sonido de la lluvia, mire por mi ventana, grandes gotas caían, era un tormenta, Vanessa aún no contestaba mis mensajes, tal vez estaba platicando con sus amigas, hace mucho que no salían o hacían algo juntas, desde que empezamos esta farsa se ha pasado la mayor parte del tiempo a mi lado, aunque eso solíamos hacer seguido, bueno pero no tanto como ahora.

No puedo creer hasta que punto hemos llegado, nunca pensé que llegaría a besarla, ella es linda, no lo voy a negar, pero nunca habia sentido curiosidad por besarla y ahora estoy perdido, deseo tanto volver a probar sus dulces labios.

¿Qué maldicion me has puesto, Vannesa, porque no dejo de pensar en ti?.

Decido dejar de escribir y salgo de mi habitación en busca de algo para comer, reviso el refrigerador, hay tarta de manzana, si Vanessa estuviera aquí le habría ofrecido un pedazo, aunque siendo sincero, pediría otra y al final se comería otras dos, esa chica es muy glotona con los dulces, pero tiene una figura increíble, supongo que correr en las mañanas le ayuda a tener esa hermosa figura.

No entiendo en qué momento empece a fijarme más en mi mejor amiga, a veces pienso que esto se ha salido de control, pero después me recuerda que solo estamos actuando, entre ella y yo no hay nada, se que cruzamos un poco la línea, ¿Pero quién no lo ha hecho?. Además los dos estuvimos de acuerdo, una vez que Clarrise nos deje en paz, terminaremos esto, volveremos a lo de antes.

¿Pero por qué no me siento feliz al pensar en ello?.

Cada vez que pienso en que tendremos que acabar esta farsa tarde o temprano, mi corazón duele, y no entiendo, no deberia de estar así y menos por mi mejor amiga.

Aparto esos pensamientos, tomo una manzana y voy a la sala, me siento en el sofá, mientras como, entonces viene a mi mente el beso que le di hace poco, se que fue algo peligroso y más estando enfrente de nuestras casas, porque tanto mis padres como los de ella podrían salir, y no me quiero imaginar en el problema que nos meteriamos.

Reviso mi celular, sigue sin contestar

Yo: ¿Ya llegaste a casa de Ana?.

Yo : ¿Porqué no me contestas?.

Decido enviarle otro mensaje, esperando tener suerte.

Yo: Vanessa, contesta por favor.

La lluvia sigue, me preocupa que aún esté en la calle y más con esta lluvia, enserio mi novia es una descuidada, no comprende que sus acciones son tan... No, quiero decir, mi mejor amiga, porque, si es mi novia, pero no real, si no, falsa, ¡Aahh! Ya no entiendo que pasa conmigo.

Subo a mi habitación. Por alguna razón  muchas cosas me recuerdan a Vanessa, los libros que tengo, varios me los regalo ella, el peluche de pato que tengo en mi cama, lo ganó Vanessa en una feria que fuimos hace tiempo en un juego de reventar globos, es muy buena en ello. Ese día la lleve de sorpresa, me había dicho que necesitaba que me acompañará a comprar una refacciones para mi motocicleta, pero en realidad la llevaría a una feria, disfrutamos ese día a lo grande, aunque no soy fan de la comida chatarra, ese día se di, y comí mucho, aunque me negué un par de veces a comer algunas cosas, ella me daba de comer en la boca, diciendo "abre grande la boca, o no crecerras" yo me reía y terminaba comiendo, subimos varias fotos a Instagram de ese día y al llegar a casa me dió el pato de peluche como agradecimiento por llevarla a esa feria.

NO TE ENAMORES DE TU MEJOR AMIGO.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora