¿Qué pasó con el Director? (STEVEN)

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Prólogo: En un día tranquilo en el museo llegas tu con otros agentes de la CIA para llevarse al Director dejando a Donna confundida y curiosa, mientras que Steven solo está contento de verte en su trabajo.

@luciernaga02g
Advertencia: Aquí la rayis es parte de la CIA.

Steven estaba en la tienda de regalos escribiendo unas cosas en un libro donde estaban los detalles de las cosas que tenían a la venta.

Era un día realmente lento por lo que no había mucha gente, sin embargo en un momento al levantar la vista, vio a dos personas de traje y lentes oscuros posicionarse a cada lado de la entrada, mientras otros tres entraban siguiéndote a ti.

–Buenos días, ¿en qué puedo ayudarles?–Les preguntó uno de los guardias.

–Venimos a ver al Director (...), no puedo darle más detalles.–Le dijiste mostrando tu identificación y guardando tus gafas de sol en el bolsillo de tu traje.

–Por supuesto, siganme.–Dijo el guardia antes de darse media vuelta para guiarlos.

Steven frunció el ceño confundido sin embargo tu no te volteaste a verlo, mientras los veía avanzar hasta un pasillo donde estaban las escaleras para subir al área de administración.

–¡Stevie!–Dijo Donna medio gritando medio susurrando provocando que diera un salto y se volteara hacia el otro lado del mostrador donde estaba la mujer con una caja encima del mesón.–¿Por qué van para allá? ¿Qué pasó? ¿A qué iban?

–N-no sé, no tengo idea...–Dijo él aún confundido volviendo a ver hacia las escaleras donde todos observaban.

–¿Cómo que no sabes? Estabas aquí, algo debiste haber escuchado.–Insistió ella pasando detrás del mostrador para quedarse viendo con el británico.

–O-osea dijeron que querían ver al Director pero no sé para qué, no entiendo...–Dijo Steven jugando con las mangas de su chaqueta.

–Pero la que iba con ellos en tu novia, algo tiene que haberte dicho o comentado.–Volvió a insistir la mujer sentándose en un taburete viendo hacia el pasillo.

–No... no sabía que iba a venir, ni siquiera me miró.–Murmuró volviendo a lo que estaba haciendo en el libro de la tienda.

–Por dios Stevie, ni bien baje la llamas para saber qué está pasando.–Le dijo Donna dándole unas cuantas palmadas en el hombro antes de tomar la caja para ordenarla.

Steven rodó los ojos y solo se limitó a escribir mientras la mujer ordenaba las cosas en las repisas de atrás y de vez en cuando se asomaba para tratar de ver algo, sin embargo no se veía nada ya que estaban encerrados en la oficina.

(.....)

Ya había pasado una hora desde que habías llegado con tu equipo, y los otros guardias que no se movían de la puerta.

De pronto, escucharon que gente bajaba y luego los vieron llevando al Director del museo hacia afuera, mientras que tu le dijiste en el oído algo a uno de los que te acompañaba que se quedó en la puerta del museo, y los demás se llevaron al director hacia afuera.

–Hola mon cher, ¿qué tal va tu día?–Le dijiste con una sonrisa acercándote hacia la tienda.

–¿Por qué se llevaron al Director? ¿Qué pasó?–Te preguntó Donna quedándose junto a Steven.

–Buen día para ti también, Donna.–La saludaste con una pequeña risita.

–No tenía idea que ibas a venir... ¿está todo bien?–Te preguntó Steven rodeando el mostrador para quedar a tu lado y tomando tu mano para jugar con ella, viéndote con una sonrisa.

–Tranquilo, no pasa nada. Son asuntos confidenciales que no estoy autorizada a compartir con ustedes.–Le dijiste con una sonrisa acariciando su barbilla antes de dejar tu mano en tú bolsillo.

–¿Pero ni un poco? ¿Ni siquiera solo un detalle? ¿Está en problemas el Director? ¿El museo se metió en algo?–Insistió Donna intrigada haciéndote rodar los ojos con una pequeña risita.

–Como ya dije, no estoy autorizada para compartir información con ustedes, es un asunto confidencial que el Director del museo debe resolver.–Les dijiste provocando que Donna soltara un quejido y se diera vuelta para seguir ordenando, mientras tú te girabas hacia Steven dejando tus manos en su pecho.–Me asignaron este caso y probablemente llegue un poco más tarde a casa hoy en la noche, así que no te voy a poder venir a recoger, lo siento.

–No hay problema, no pasa nada, quédate tranquila.–Te dijo con una sonrisa acercándose para dejar un beso en tu mejilla.

–Okey... de todas formas te prometo que te lo voy a compensar.–Le susurraste al oído haciéndole sonreír de forma boba llevando tus manos para acariciar sus mejillas.–Ahora me tengo que ir, nos vemos en la noche.

–Si... bien... cuídate.–Te dijo acercándose para besarte con ternura.

–Te amo. Nos vemos Donna.–Le dijiste con una sonrisa antes de voltearte a la rubia que rápidamente se giró para fingir qur no estaba escuchando, y luego te alejaste para salir por las puertas del museo con el otro que se había quedado esperándote.

–¿Y bien?–Dijo Donna acercándose a Steven provocando que este se volteara hacia ella confundido.

–¿Y bien qué?

–¡Qué te dijo!

–Que hoy iba a llegar tarde.–Dijo Steven viéndola sin entender realmente.

–¡Eso no! No me importa a qué hora llegue a su casa, quiero saber por qué se llevaron al Director, no alcancé a escuchar.–Se quejó ella viéndole rodear el mesón para guardar el libro.

–No dijo nada, es confidencial, la escuchaste.–Respondió provocando que la mujer rodara los ojos.

–Dios santo...–Se quejó ella rodeando el mostrador para salir de ahí.–Termina de ordenar, ¿quieres? En un rato llega un tour con niños y padres y probablemente vengan a la tienda.

Donna se alejó por el pasillo dirigiéndose a la oficina del Director donde estaba su secretaria, y Steven solo soltó un suspiro rodando los ojos.

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