Draco estuvo todo el día pensando en Hermione, le preocupaba el hecho de que hasta él reconocía que había arremetido duro contra ella, en su afán por dejarla satisfecha no había contemplado el hecho de que la castaña no era del todo experimentada y hasta le dio pena su pobre vida sexual.
Cuando Wynne tomaba su siesta por la tardecita, Draco se fue hacia la habitación de la castaña y toco suavemente, no esperaba respuesta por lo que se atrevió a abrir y la vio en la cama poniéndose en pie con un rictus de dolor
-¿Estás bien? – Preguntó nervioso
-N-no – negó la muchacha – Me duele mi cuerpecito
-Perdóname Granger – Masculló el rubio – De haber sabido que no estabas acostumbrada a ser bien servida, pues te hubiera complacido del modo normal y aburrido de siempre…
-¿Qué?
-Supongo que después de lo sucedido, debes estar tan asustada como para tener sexo conmigo de nuevo
-¡Pero que petulante, ya por fin se te sale lo Malfoy! Presuntuoso…
-Mírate Granger, casi no puedes caminar…
-¡Me duelen los moretones que me dejaste!
-No aguantas nada Granger… - Sonrió Draco y salió unos segundos regresando con un par de cosas en las manos, una pócima revitalizante y una pomada para los moretones…
-No podré ponerme eso – gruñó la castaña
-Claro que no, no puedes mover ni las manos, por eso te lo pondré yo, así que por favor, quiero que te quites la bata
-¿Qué cosa dices?
-¡Perdóname la vida, Granger! ¡Lo que pasa es mi lujuria y lascivia me exige que te vea desnuda de nuevo! – Le dijo en tono mordaz
-Pedante…
-¡Por Dios Granger! Puedo esperar a que te sientas mejor antes de darte otra lección de cómo hace el amor un verdadero hombre…
Hermy se sintió media idiota, pero no quería que Draco pensara que después de lo sucedido entre los dos, era una mojigata hipócrita, por lo que deslizó la bata de su cuerpo, no andaba nada debajo, excepto su piel y los moretones… El rubio hizo un gesto, pero no de emoción, más bien de culpa
-¿Y bien? – Gruñó la castaña
-No volveré a tocarte – susurró el rubio
Lentamente comenzó a tomar la pomada y untarla en los moretones en su cuello, lentamente sus dedos se deslizaron por la piel doliente, ella procuraba no moverse, ya que la presión de los dedos por muy suave si le provocaba dolor.
-¡Auch! – No pudo evitar soltar unos quejidos
-Lo lamento… Ahora, abre las piernas…
Ella jadeó un momento y sus mejillas se tiñeron de rojo, pues si, ni los muslitos se habían salvado de los dientes torturadores del rubio o de sus labios succionadores estilo chupamirto mezclado con sanguijuela
La posición era de lo más incómoda, pero necesaria, así que mirando a otro lado, sentadita, tuvo que abrir las piernas y Draco comenzó a poner la crema en las partes afectadas, para Hermy era vergonzoso, pese a que el rubio ya le conocía hasta las credenciales.
-Tranquila, no tienes nada por lo que avergonzarte… eres una mujer limpia e inocente en cierto modo…
-¿Inocente? – Protestó
-No estás maleada en este respecto… tu forma de hacer el amor es la tradicional, no conocías estos caminos retorcidos que yo, lo cual no me extraña, la comadreja no se veía muy hábil para estos menesteres
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Un Dragón bajo la tormenta
FanfictionDraco Malfoy después de la guerra se entera que es papá, a sus brazos llega una niña hermosa que iluminará su oscura vida y lo llenaría de luz, sin embargo a los pocos años, ocurriría un suceso que lo llevaría a reencontrarse con viejas enemistades...