Asalto Dragonico

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Mientras Alephis seguía teniendo una crisis de rechazo hacia el engendro dentro de su cuerpo, un viejo conocido se acercaba a la ciudad de las Manteras, Heldriosis, nadando a velocidades comparables con delfines luego de haberse curado y haberse vuelto mas de 10 veces mas fuerte que nunca, las Manteras dentro del gremio reciben un aviso gracias a un aparato en el oído, este les avisa de que la calamidad que se acerca es un nivel raramente registrado

Heldriosis sale del mar con un salta y ruge hace la ciudad cuando cae, esa cosa había evolucionado para contrarrestar sus oponentes, las Manteras empiezan la evacuación de la ciudad para los mas débiles, mientras que el ejercito y algunas de las m...

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Heldriosis sale del mar con un salta y ruge hace la ciudad cuando cae, esa cosa había evolucionado para contrarrestar sus oponentes, las Manteras empiezan la evacuación de la ciudad para los mas débiles, mientras que el ejercito y algunas de las mas fuertes del gremio como Mary-ie se quedaban. 

El ejercito ponen en marcha su plan cuando no quedan residentes dentro de los edificios y empiezan a bombardear al dragón con bombas de 15 toneladas, sin mucho efecto, a lo que este responde con un latigazo de su cola que arrasa con casas y edificios como mantequilla, la bestia era tan rápida que incluso podía dar manotazos a la artillería y con sus cuernos este empieza a recoger la energía esparcida por las bombas para luego recargar su contraataque, un rayo de energía concentrada que como la vez pasada va dejando setas nucleares por cada sitio que las deja, la bestia localiza a algunos residentes que no pudieron escapar a tiempo y cuando esta a punto de atacar, una vieja conocida aparece plantando cara al dragón cuando esta le pega un puñetazo en la cabeza, es Epizotis, aunque ciego y en un estado deplorable esta corre hacia la bestia con velocidades hipersónicas y con su arma preferida, su lanza personal corta pequeños trozos del gran dragón. 

El dragón desconcertado y algo herido mira a la chica la cual con una risa de loca vuelve a ir por el dragón, esta escala el lomo de la bestia mientras corre para llegar a la cabeza en la cual ella usa su lanza para cortar un cuerno del dragón, el cual al caer destroza una casa cercana, la bestia grita de dolor, aquel grito imbuido de ira y agonía llego hasta el viajero de otro mundo, aunque no estaba seguro de que hacer con el poder que ahora tenía no podría dejar que aquella bestia acabase con las únicas personas con las cuales el había tenido contacto.

Mientras Alephis llega a la ciudad, el dragón sabe que ahora no podrá usar su arma mas destructiva pero no significa que se haya quedado sin armas, este empieza a lanzar llamas que probablemente derritiesen incluso el oro al mas mínimo contacto, Epizotis era mucho mas rápida que aquella flama así que no tendría problemas en esquivarla.

Todos se quedaron parados cuando el cielo de repente se hizo negro, incluso el dragón paro, era una tormenta tan intensa que parecía que los dioses estuvieran enojados, pero no era un dios, era Alephis el cual cuando se acerca a la ciudad y ve tod...

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Todos se quedaron parados cuando el cielo de repente se hizo negro, incluso el dragón paro, era una tormenta tan intensa que parecía que los dioses estuvieran enojados, pero no era un dios, era Alephis el cual cuando se acerca a la ciudad y ve todo en la miseria no pierde ni un segundo y juntando sus manos crea un bombardeo de agua a presión contra el dragón, lo cual raja su piel e incluso atraviesa las zonas mas finas como sus brazos, aquel muchacho aunque mas lento que Epizotis, se acerca al dragón y le dice

Alephis: Te veré en el infierno

Antes de crear una burbuja alrededor de ambos para proteger el resto de la ciudad y  generar una explosión con toda la energía nuclear que había guardado desde que llego a este mundo, la energía nuclear era tan grande que la diferencia de poder entre ambos podría ser mas de 50, el dragón solo se retuerce de dolor con cada expulsión de energía que Alephis generaba, pero el también recibía daño de sus propios ataques lo que hacia que posiblemente murieran ambos

Heldriosis mira al chaval antes de cambiar el color de sus espinas dorsales, las cuales se hacen de color blancas como la nieve, proporcionando un frio abrumador a su alrededor y en su cuerpo, proporcionando cierta protección contra el abrumador calor nuclear, pero mala suerte para el , Alephis al ver como este crea aire frio a su alrededor empieza a a romper a pedazos las espinas dorsales causando dolor al dragón y luego de romper varias espinas recolecta todo el calor posible en su mano y pega un puñetazo en la barriga del dragón atacando hasta sus átomos, la burbuja de agua se destruye enseñando polvo del cuerpo del dragón y un joven chico en el suelo herido hasta la muerte...

El impacto del TrascendeteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora