S I E T E

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<<Todo se sintió lejano, todo se rompió, los lazos se desvanecieron. Perdida en el vacío, sumida en la oscuridad, un luto interminable.

Cerraba los ojos con la esperanza de que cuando los abriera, desear que todo esto no hubiera pasado. Fué un vaivén de emociones, me enojé con él, le reproché en su lápida con lágrimas en los ojos, pero después todo dió un vuelco inesperado. Le agradecí por todos los bellos años que pasé a su lado.

¿Dime qué ves, Bella? —preguntó la Dr. Mara al otro lado del escritorio, con los dedos entrelazados.

Nada, tengo los ojos cerrados ¿Se acuerda? —respondí cortante.

No me agradaba la idea de tener que contar a una persona desconocida sobre mis problemas.

Imagina un precioso bosque, lleno de árboles frondosos, pájaros cantores sobre éstos, hermosas flores desprendiendo aromas maravillosas, un cielo azulado y despejado.

Precioso, a mamá la encantaría —sonreí

En ese caso los cielos se nublan, llueve a montones por todos lados, los pájaros se marchan en busca de un cobijo ¿Cómo queda?

Fatal —dije abriendo lentamente los ojos.

El precioso bosque eres tú Bella, las inclemencias del tiempo es la terrible enfermedad que amenaza con destruirla. Pero ¿Sabes una cosa?, confío plenamente en tí, en tu potencial recuerda esto como una etapa difícil, un mal momento de tu vida

>>Soy fuerte, es lo primero que debes instalar en tu vocabulario, no dejes que el miedo te invada. Volvamos al ejemplo del bosque, el sol no querrá salir tras ver que la lluvia se ha apoderado de todo ¿Sabes que pasará después?.

Lloverá y lloverá.

Exacto

Solté una bocanada de aire mientras miraba la puerta con fijeza, con la esperanza de que Ava apareciera

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Solté una bocanada de aire mientras miraba la puerta con fijeza, con la esperanza de que Ava apareciera. Hace dos días que no se había dignado a aparecer por el instituto, algo no muy normal en ella. Fui a su casa pero Jaden dijo que no se encontraba en condiciones de recibir a nadie, acepté a regañadientes y salí del lugar.

La profesora de matemáticas dió la espalda a la clase para escribir algo en el pizarrón, agarré mi lapicero y comencé a anotar en mi pequeña libreta, pero tenía la mente en otro lado.

Las horas pasaron en un borrón y llegó la hora de receso.

Guardé mis cosas y caminé en dirección a la cafetería, ésta sería la primera vez que tendría que almorzar sola.

Agarré una bandeja y tomé un sándwich de jamón y un yogurt de fresa, busqué una mesa vacía y me senté, no quería contacto con gente por ahora.

¿Amor u Odio?: Definitivamente AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora