Hecho para mí (Tn/Gabe)

[~Capitulo 37~]

*toc toc toc*

Abril: esperas a alguien?

Saul: deven de ser las pizzas que pedimos

Abril: a si jajaja, ya ni me acordaba

Saúl: jajajaj, no importa, solo tápate poquito

Abril: ah si -estaba solo en mi ropa interior-

Saúl: Gabriel?

Gabriel: quítate de mi camino -lo empuje, y entre a la casa- abril!!!

Abril: Gabriel... que... que haces aquí

Gabriel: estás desnuda?

Abril: n...no

Gabriel: me engañaste con este baboso que no tiene nada de gracias

Saúl: al parecer tengo más que tú, para que abril se aya fijado en mi

Gabriel: ni te emociones, esta es una zorra que a cualquiera le dice que si

Abril: respétame

Gabriel: no te respetas ni tú! Zorra

Ella intentó darme una cachetada, pero la detuve

Gabriel: que quede claro que no me importas tú, me importa mi hijo, así que te vistes, y olvídate de este pendejo, por que mientras tengas a mi hijo en tu vientre, no lo volverás a ver, después de eso, puedes hacer con tu vida lo que quieras -la tome del brazo, y me la lleve al carro-

Abril: suéltame!!

Saúl: suéltala wey! -lo jale del brazo-

Gabriel: suéltame -le pegue un trompón-

Saúl: quieres que se armen los putazos, demole pues

Gabriel: no me voy a poner a pelear con un imbecil que no está en sus cinco sentidos

Y justo cuando dije eso, lo empuje para subirme al carro, pero abril abrió la puerta del carro, y salió corriendo

Gabriel: abril!!!

Saúl: no mames!!

Gabriel: abril -corrí donde ella, un carro la avía atropellado, y estaba tirada en el piso con mucha sangre-

Saúl: abril, estás bien

Gabriel: que no ves que la acaban de atropellar imbecil!! Llámale a una ambulancia

Saúl: ah si

(..)

Gabriel: cómo está abril, doctor

Dr: se encuentra en muy mal estado

Gabriel: y mi hijo como está?

Dr: estamos asiendo todo lo posible por salvar a los dos, pero no le aseguro nada

Gabriel: no puede ser, y...y puedo verla?

Dr: ahora no, vaya descanse y regrese mañana por la tarde

Gabriel: doctor yo necesito verla

Dr: está bien, le doy cinco minutos

Gabriel: muchas gracias

El doctor me indicó en qué habitación estaba abril

Gabriel: Dios, mira nomás cómo estás mujer...