Secret Love Song - Violeta Hódar

Semana 13. Gala Final

N.A: Hola! Último capítulo de hoy, espero lo disfruten...tengo pensado para el post - ot algunas cosas puntuales no todas antes de los conciertos. Me encantaría leer que les pareció hasta ahora y que canciones se imaginan que podrían estar en el setlist. Los leo en comentarios, Saludos!

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Último martes en la academia, última vez que se despertarían temprano para mirar las cuatro juntas el amanecer, aunque estaba la opción que después de la fiesta y compartiendo todas hotel y con la estrella completa se lo pensaran, todo dependía del nivel de alcohol que tuvieran en la sangre al terminar la noche.

Arizona estaba más que sorprendida pues esa mañana no hizo falta despertar a ninguna, pues ya todas estaban esperándola después de ir al baño para caminar hasta la terraza, no les importaba si las regañaban por lo que se prepararon un té para sentarse bajo una manta disfrutando de la compañía de sus amigas, de su chica.

Ruslana fue la primera en romper el silencio agradeciéndoles a todas por esas semanas, el apoyo, el cariño, el estar ahí cuando se sentía realmente sobrepasada de emociones o incluso cuando el concurso comenzó a asfixiarla por querer encerrarla en un estilo que no iba para nada con ella. Sintió rápidamente el abrazo de todas, y las palabras que no sabía que necesitaba escuchar, no dejarían de verse una vez fuera e incluso si tenían mucho trabajo encontrarían la manera de seguir compartiendo juntas.

Kiki no pudo evitar emocionarse con las palabras de su pelirroja favorita, mencionando algo que tenía en mente desde hacía algunas semanas, el cómo siempre había sentido que la gente no la entendía o no le caía bien por su manera de ser, el cómo en ocasiones se sentía rara o un bicho raro no sólo por su TDAH sino también por sus intereses que en ocasiones era diferente al resto.

Y desde que las había conocido, incluida Denna, se sentía por primera vez no sólo cómoda con demás personas, sino consigo misma, amando esas pequeñas cosas que la hacen diferente y no por eso significaba que estaba mal, así como también el sentirse querida por Rus, el cómo desde el primer momento en que conectaron la hizo sentir especial y no cómo una segunda opción como le pasaba siempre.

El cómo no importaba cómo se expresará ellas cuatro siempre lograban entenderla, cada una desde su lugar, escuchándola, aconsejándola y en ocasiones sumándose a sus locuras. Sintiendo que no importaba si tenía que mudarse a Madrid y dejar su piso en Barcelona al terminar el concurso, o incluso si no podía volver pronto a la ESMUC porque sabía que las tendría a ellas cuatro siempre.

- Bua, honey – Ari estaba sin poder contener sus lágrimas – es que, si empezamos así la semana, vamos a terminar deshidratadas

Porque eso era algo especial de Kiki, decir cosas tan importantes y significativas cómo si no fuera nada, que dejaba a todas sin saber cómo reaccionar o incluso gestionar la emoción más que acercándose para rodearla en un abrazo. Desde luego que Rus quería decirle tantas cosas a su novia, dándole una mirada de que sería en privado, pues era algo que quería que quedara solamente para ambas y sabían que sus amigas lo entenderían.

Incluso Violeta aprovechó ese momento para hablar, con su facilidad para con las palabras sintiéndose demasiado emocionada para explicarse, así que sintiendo que su pelinegra tomaba su mano dejando suaves caricias, decidió que no importaba si no lo decía perfecto, importaba porque lo sentía. El cómo desde siempre le había costado mucho mostrarse vulnerable, por miedo a que la lastimaran, a no sentirse comprendida, o incluso algunas personas de su pasado le habían dado a entender que lo que le pasaba o sentía no era tan importante.

Pero el conocerlas, le había dado la libertad de sentir sin limitarse, sin esconderse y ser tal cómo era, pues su padre siempre le decía que tenía que cuidarse eligiendo a personas que la cuidaran de la misma manera y sin dudas lo había encontrado en ellas cuatro. El cómo le ayudaron no sólo con sus inseguridades de sentirse un NPC que quizás no aportaba nada, el compararse musicalmente con todos y sentirse inferior, así como los complejos que tenía con algunas partes de su cuerpo.