Capítulo VIII

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¡Hola a todos! Tenía bastante bastante olvidada esta historia jejejeje.

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Besos y abrazos

Un mes después de su primera noche juntos, Rhaenyra y Daemon hacían el amor todos los días. 

Juntos, habían descubiertos nuevas maneras de tomar el placer del cuerpo contrario, y muchos días habían decidido ni siquiera salir de la habitación. 

Sin embargo, tuvieron que separarse cuando Daemon debió regresar a la capital para atender algunos asuntos urgentes.

Daemon pensó que Rhaenyra querría volver con él, pero ella estaba fascinada con un dibujo que estaba pintando, y prefirió quedarse en Pentos, después de todo, él había prometido volver pronto. 

Se despidieron luego de una apasionada noche y ella le dijo que lo estaría esperando para poder continuar sus aventuras de cada noche.

Pero por supuesto, las cosas no siempre salían como se planeaban.

Rhaenyra estaba terminando su dibujo en su habitación, cuando uno de sus lápices favoritos se terminó.

Por supuesto, ella solo habría tenido que ordenarlo y habría tenido sirvientes corriendo a llevarle el lápiz del tono exacto que ella necesitara.

Pero ella no quería eso, ese día, ella quería ir ella misma por sus cosas.

Tenía entendido que cerca de Pentos había una librería gigantesca, de donde habían salido la gran parte de sus cosas.

Un poco nerviosa ella se vistió y salió del palacio.

Sus guardias la acompañaron y ella se preguntaba si ellos estaban allí para cuidarla, o si su tío los había dejado allí para vigilarla.

Todo parecía indicar que ellos solo velaban por su seguridad, porque no estaban atentos a todo lo que ella hacía, solo a los alrededores.

Ella llegó a la librería y sonrió cuando vio lo gigantesca que era.

Una persona podría incluso perderse comprando allí.

Buscó los materiales de arte que le faltaban y los llevó a la caja para pagar, fue entonces cuando reconoció al cajero.

- ¿Gwayne? ¿Gwayne Hightower?- preguntó ella reconociendo al hermano mayor de Alicent y él sonrió.

- ¿Princesa? ¿Qué hace usted acá?- preguntó Gwayne sonriendo y Rhaenyra sonrió también.

- Vacaciones, ya sabes, luego de dejar la universidad- dijo Rhaenyra y Gwayne sonrió con tristeza.

- Supe lo de la universidad, lamento lo que hizo mi hermana, sé que ella tiene gran parte de la culpa- dijo Gwayne y Rhaenyra sonrió con tristeza.

- Sabíamos que pasaría- dijo ella mirando hacia abajo con un poco de vergüenza y tristeza- Soy la princesa heredera, se supone que solo me preocupe por mi país, más no por estudiar- dijo ella y Gwayne suspiró.

- Lamento que sea así, aún así, pensé que el príncipe no pensaba así- dijo Gwayne y Rhaenyra sonrió con tristeza.

Si, algunas veces ella pensaba lo mismo, pero cambiar a hombres que se habían criado por las antiguas reglas, era bastante difícil.

Aunque a veces, ella veía a Daemon estudiando la opción de permitirle volver a estudiar, aunque, no quería tentar a su suerte preguntándoselo de nuevo.

- Como sea ¿Cuánto es?- preguntó ella y Gwayne le hizo el cobro.

Todo debería haber terminado allí, pero Gwayne Hightower se sintió tentado a hablarle nuevamente a la princesa.

Eres solo mía y no te dejaré jamás (Daemyra)Where stories live. Discover now