Harry Potter : Another Chance (HP:Otra Oportunidad) - 1

Capítulo 62:Dilema moral

Descargo de responsabilidad:

Harry Potter y todos sus personajes pertenecen a JK Rowling.

No soy dueño de nada más que de los personajes originales que hago.

"Diálogo"

'Pensamientos'

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James parecía mucho más pálido cuando su rostro salió del pensativo.

"¡Ese bastardo! No puedo creerlo . . . ¡Malfoy! ¡¿Creen que pueden simplemente ir tras mi familia?!".

"¿Entiendes ahora?". preguntó Harry con calma.

James regresó a su escritorio y se desplomó en la silla. Se tomó un minuto para recomponerse antes de volver a hablar.

"Entiendo lo que está en juego, Harry. Pero no creas que puedes pasar por alto todo lo que te vi hacer allí . . . ¿Usar crucios para torturar y la maldición asesina? . . . esas son 'su' forma de hacer las cosas!!".

Harry no reaccionó en lo más mínimo.

"¿Habría sido más moralmente aceptable si hubiera torturado y matado a ese hombre usando hechizos legales? Podría haber conjurado cien agujas para apuñalarlo por todas partes y acabar con él volándole la cabeza con un reducto. Además, tenía una buena razón para usar específicamente esos hechizos".

"¿Te importaría explicarlo?". Preguntó James.

"Ahora que entiendo un poco mejor los métodos de detección que usan los Aurores, decidí dejar una pista que podría llevar a la investigación de algún Mago Oscuro rival . . . después de todo, como dijiste, los imperdonables son algunos de sus hechizos favoritos, los utilizados por sus seguidores".

"Querías guiar la investigación hacia otros miembros de su círculo íntimo, con la esperanza de que los Aurores encontraran alguna evidencia incriminatoria que pudiéramos usar contra ellos". James podía adivinar.

Harry asintió.

"No es un mal plan . . . aunque sí a sangre fría. Usar las maldiciones imperdonables para tal desvío de información James no sentía que las acciones de Harry estuvieran justificadas.

"¿Funcionó?".

James negó con la cabeza.

"No estoy a cargo de esa investigación, así que no tengo todos los detalles. Pero por lo que he escuchado, no se están haciendo movimientos importantes contra ningún señor sangre pura. Tienes que entender que todos esos Señores tienen mucho poder en el Ministerio. Ni siquiera podemos abrir una investigación sin alguna evidencia grave sobre ellos".

James miró el pensadero.

"Obviamente, no podemos usar tus recuerdos . . .  el único que terminaría en Azkaban serías tú".

"No es que ponerlos en esa prisión sirva de mucho . . . Voldemort puede controlar a los Dementores. Es mejor eliminarlos". Dijo Harry.

"Harry . . . " dijo James con tono de advertencia.

"Por lo que Malfoy ha revelado, ya no estamos luchando contra el verdadero Señor Oscuro, sino contra un pretendiente con mucho poder político".

"Eso es verdad". Admitió Harry.

"El que está a cargo ahora es Lord Parkinson. Realmente no sé mucho sobre ese hombre. Sólo he visto a su hija unas pocas veces".

"Lo conozco un poco. Todavía asisto a algunas reuniones del Wizengamot, cuando hay alguna ley ridícula que están tratando de implementar, y Lord Parkinson siempre está ahí, ese hombre no falta a una sola reunión. Es una persona muy Persona seria y tranquila. Sus opiniones políticas son incluso más extremas que las de la mayoría de los conservadores. Había votado por algunas leyes muy controvertidas, pero de todos modos, parece ser muy respetado entre sus pares. Ahora sé por qué . . . ".

"Tienes que tener cuidado con él. Él es quien más te quiere muerto, y quien ordenó a esos Mortífagos que nos atacaran a mí y a mamá en ese callejón".

"Sí, eso fue . . . ¡Espera un momento!". James parecía haberse dado cuenta de algo.

"Ese eras tú, ¿No?". Señaló a Harry.

"Sí, yo también estuve allí, ¿A qué te refieres?". Harry ladeó la cabeza.

"¡Eso no! Tú fuiste quien mató a esos hombres. ¡No hubo ningún hombre misterioso con una túnica negra que apareció justo a tiempo para salvarte a ti y a tu madre!".

"Sabes . . . cuando lo dices así en voz alta, suena difícil de creer. Y por supuesto, fui yo, pensé que ya habías llegado a esa conclusión hace meses".

"Pasé dos meses buscando por todo el país a ese misterioso encapuchado". Se lamentó James.

"Lo lamento . . . ". Jame suspiró derrotado.

"Que perdida de tiempo . . . ".

"¿Podemos volver al tema que nos ocupa?". Preguntó Harry.

James puso sus manos sobre la mesa.

"Bien . . .  por el momento, debes dejar de jugar al justiciero. No más andar por ahí secuestrando, torturando y matando . . . No puedo creer que tenga que pedirlo".

"Yo tampoco, ¿Se supone que no debo hacer nada en absoluto?". Harry resopló.

"Estamos lidiando con un enemigo diferente al que ustedes conocen. Esta es una batalla de política y corrupción".

"Odio la política . . . ". Dijo Harry.

"Yo tampoco la amo . . . voy a necesitar algo de tiempo para procesar esta información. También necesito investigar algunas cosas en el Ministerio". Dijo James.

"Según Malfoy, al menos la mitad del Departamento de Aurores es corrupto y ya está en sus bolsillos". Harry decidió recordárselo.

"Sé en quién puedo confiar. No necesitas preocuparte por mí. Ese es mi trabajo".

"Bien, sólo ten cuidado"

James parecía feliz de ver la preocupación de su hijo por él.

"Es mejor si sacas ese recuerdo del pensadero".

"¿Qué le vas a decir a mamá?". Preguntó Harry mientras recuperaba el recuerdo con su varita y lo reabsorbía en sí mismo.

"Casi todo. Puede que me salte el pensamiento del secuestro y la tortura . . . Pero ella querrá saber el resto. Antes de que nacieras, ella estaba luchando a mi lado contra Voldemort y sus seguidores". 

"Sé que ella es increíble . . . ". Simplemente no quería que ella estuviera en peligro, eso era todo.

"Lo es. Deberías irte a la cama ahora. Podemos hablar más el fin de semana cuando regrese", dijo James. 

"Puedes dejar a Dobby aquí, haré que Mipsy lo ayude a calmarse".

Harry se giró para mirar al elfo, que había estado esperando pacientemente a un lado.

"Lo escuchaste Dobby. Sé amable con mi familia. También será tu familia de ahora en adelante".

"Por supuesto, Maestro Harry. ¡Dobby será el mejor Elfo!".

Cuando Harry estaba a punto de abrir la puerta para irse, su padre lo llamó nuevamente.

"Ah, y Harry . . . ".

"¿Sí?". Se dio la vuelta.

"Estás castigado".