NARRADOR
El sol apenas empezaba a asomarse por las ventanas del dormitorio, sus primeros rayos iluminando suavemente la habitación. T/n estaba acurrucada junto a Hermione, su respiración profunda y tranquila, evidenciando el sueño reparador que ambas disfrutaban después de una noche llena de pasión. Hermione con su cabello alborotado y una expresión de serenidad en su rostro, estaba entrelazada con T/n, sus cuerpos encajando perfectamente como si fueran dos piezas de un rompecabezas.
T/n abrió lentamente los ojos adaptándose a la luz tenue del amanecer. Una sonrisa se dibujó en su rostro al recordar los momentos intensos que compartieron la noche anterior. Con cuidado se deslizó fuera de la cama para no despertar a su Novia. Se quedó unos momentos observándola, admirando su belleza y la paz que irradiaba mientras dormía.
Sabía que hoy era un día especial. Había estado planeando este momento durante semanas, buscando la manera perfecta de proponerle matrimonio a Hermione. La sorpresa debía ser perfecta y T/n quería asegurarse de que todo saliera bien. Se dirigió al baño para asearse, su mente repasando cada detalle de su plan. Y Después de ducharse y vestirse, T/n volvió al dormitorio y se sentó al borde de la cama acariciando suavemente el cabello de Hermione. A medida que los minutos pasaban Hermione comenzó a despertarse, sus ojos castaños encontrándose con los de T/n, llenos de amor y complicidad.
T/n: Buenos días, mi amor -dijo T/n en voz baja inclinándose para darle un suave beso en los labios-
Hermione: Buenos días -respondió, estirando los brazos hacia T/n- ¿Qué hora es?
T/n: Son las nueve -contestó T/n abrazándola- Pero no pude evitar despertar un poco antes hoy
Hermiome: ¿Por qué tan temprano? Pensé que podríamos quedarnos un poco más en la cama -dijo, a lo que T/n rió suavemente-
T/n: ¿Recuerdas que planeamos pasar el día con nuestros amigos?
Hermione: Claro lo recuerdo -respondió con una sonrisa- Será agradable pasar tiempo con ellos
T/n: Ahora vamos a levantarnos. Tus padres ya están abajo esperándonos para desayunar
Hermione: Voy a darme una ducha rápida. Baja tú primero, no me tomará mucho tiempo -Hermione se levantó de la cama, estirándose-
T/n: Entonces te espero
Hermione: No es necesario Mi amor -dijo sonriendo- De verdad seré rápida
T/n: Está bien respondió T/n dándole un último beso antes de dirigirse a la puerta- Nos vemos abajo
T/n salió del dormitorio descendiendo las escalera, y Al llegar a la planta baja el aroma del desayuno casero la recibió, t/n Siguió el olor hasta la cocina donde encontró a los padres de Hermione Mónica y Wendell Granger, ocupados preparando la mesa. Mónica con una sonrisa cálida levantó la vista al verla entrar.
Mónica: Buenos días T/n -dijo Mónica dejándolo que estaba haciendo para acercarse y darle un abrazo- ¿Cómo dormiste?
T/n: Buenos días señora -respondió T/n, abrazándola con afecto- Dormí muy bien gracias. ¿Cómo está todo aquí?
Mónica: Todo en orden dijo devolviéndole la sonrisa. Acabo de preparar café y panecillos. Espero que tengas hambre. ¿Y dónde está mi hija?
T/n: Todavía está en la ducha, Dijo que bajaría en un momento
Mónica: Perfecto La esperaremos entonces. No hay prisa
T/n: Me parece Bien
Wendell: Buenos días T/n, ¿Preparada para el gran día?
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Haría cualquier cosa por ti [Hermione Granger y tú]
De TodoT/n Grindelwald es una Chica que no le importa Jugar con los sentimientos de los Demás, para ella solo le importa Pasar la noche con una chica diferente, y no tener nada serio, pero Algo cambio cuando conoce a una Castaña, Esa castaña lograra hacer...