Quattordici👑🗡️

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Octavo día

Cuando Seungmin tachó el octavo día en el calendario, supo que algo andaba mal. Después de que su castigo fue aplazado, no pasaron realmente muchas cosas; se había limitado durante los últimos días a dormir, comer lo que le era servido y tomar ducha tras ducha. Su corazón latía de forma descontrolada por las noches, sabía que algo estaba sucediendo porque ni siquiera los empleados hablaban, algo tan simple como un saludo siempre se le era ignorado. Tampoco había vuelto a pensar alguna estrategia, no confiaba del todo en Minho pero si estaba allí con él no sería por cualquier cosa. Y a pesar de todo, en el fondo de sus pensamientos siempre terminaba velando por el bienestar del heredero. Trató de convencerse de que estaba allí solo por una misión, porque necesitaba el dinero, y eso lo impulsó a convencer a su cerebro de que rezaba para que estuviera bien solo para poder finalmente llevarlo con él.

La puerta se abrió de forma repentina mientras un preocupado peliazul se asomaba, tomando una mueca más liviana cuando sus ojos encontraron a los del castaño despiertos a pesar de que eran las cinco de la mañana.

- Disculpa por el susto - fue lo único que dijo, aterrando al contrario por su tono de voz -. Tu castigo será denegado por ahora. El príncipe está enfermo, así que debes de encargarte de él. Sus padres necesitan salir en un viaje de negocios durante cuatro días y necesitan estar seguros de que su hijo está a salvo.

Tragó con dureza ante las palabras del chico frente a él; aun sin saber el motivo, la estancia en solitario con el heredero de los Hwang lograba poner todos sus vellos de punta. Asintió después de unos segundos como respuesta a la orden de Jeongin, por lo que este hizo un gesto con la cabeza para que lo acompañara. No quiso hacerse de rogar y acompañó al menor hasta los aposentos de nuevo. Esta vez, el lugar lo recibió con frialdad; las cortinas estaban cerradas, las persianas casi que lo estaban también. La única luz era la de la tenue lámpara de la mesa de noche, la cual iluminaba el rostro de un Hyunjin que parecía dormir plácidamente. El desorden si que logró incomodarlo ya que, aunque él tampoco perdía mucho tiempo en colocar cada objeto en un lugar concreto, las pertenencias del príncipe parecían estar ahí  para formar una imagen desastrosa de forma intencional.

- Lamento todo el desorden, la verdad es que no he tenido nada de tiempo para ordenar - de nuevo, la voz del peliazul consiguió devolverlo a la realidad -. Espero que no sea realmente una molestia para ti. Debo marchar ya porque los reyes saldrán en breve, pero tienes un teléfono fijo en la mesita de noche en caso de que necesites algo - explicó rápidamente mientras recogía algunas cosas y las guardaba de forma desordenada en una mochila. Después, caminó hasta que llegó al marco de la puerta, donde se detuvo -. Por cierto - susurró antes de mirarlo -. Cuida bien a Hyunjin, por favor. Es la única familia que me queda.

Y antes de poder dar lugar a cualquier tipo de pregunta o explicación, el menor solo marchó y cerró la puerta detrás de él. Por un momento, se sintió horrible de pensar que estaba planeando separar al chico de su familia. Sacudió su cabeza ante esos pensamientos. Él estaba ahí para hacer su trabajo. Pero su corazón fue más fuerte que su cerebro. Musitó un suave "lo siento" mientras las  lágrimas se desprendían finalmente de sus ojos, cayendo pesadamente por sus mejillas hasta finalmente desembocar en su pantalón gracias a que se encontraba sentado. Cerró los ojos con tormento para dejar de ver el rostro que lo había mantenido atormentado desde que puso por primera vez sus pies sobre esos terrenos. Sin embargo, este seguía apareciendo con su sonrisa burlona. Sí, era muy adicta a ella recientemente. Y odiaba eso. De alguna forma, todos los días pensaba en él, y después, en lo que estaba haciendo. 

Tomó algunos segundos para controlar su respiración, dado que esta había logrado alterarse hasta ser sonora. Abrió sus ojos y se dispuso a limpiar sus lágrimas. Pero no pudo. Otra más cayó cuando un pulgar ajeno quitó la que estuvo en momentos anteriores.

- ¿Por qué lloras? - la voz debilitada de Hyunjin le hizo sentir calma. Por desgracia, eso no era lo que debía sentir.

- No os preocupéis. Deberíais descansar. ¿Queréis algo de comer o beber?

- No. Estoy bien así.

Asintió en completo silencio mientras el heredero le daba la espalda. Y como impulso, estiró su mano hasta esta y la acarició. El príncipe relajó todos los músculos que había mantenido tensos por culpa del ejercicio y sus costumbres y se dejó querer por el chico del que estaba a cargo.

- Está bien llorar a veces - Seungmin dio un leve respingo ante el comentario -. Nadie es de piedra. No tenemos que ser felices siempre. No es lo ideal. No me gusta ver a la gente llorar, y tampoco me gusta hacerlo, pero creo que es la mejor forma de decirle a alguien que no estás bien. A veces vale mucho más que las palabras. Debe ser extraño que esté siendo agradable contigo - susurró antes de liberar una risa nasal -. Tampoco he estado bien estos últimos días. Quiero decir, sé que estoy enfermo. Pero no es solo eso. Es una sensación en mi pecho que no me deja respirar adecuadamente. Es parecido a sentir miedo. Pero no sé qué está pasando realmente. Escuché a papá hablar de mi el otro día. Está preocupado porque muchas personas quieren mi cabeza ahora. Y no sé porqué. No soy un santo, pero no he hecho nada malo - esa última frase logró erizar su piel, pero también le hizo sentir mal por lo rota que sonaba la voz del chico junto a él. Por primera vez, no vio a un hombre; vio al niño que era realmente.

👑🗡️

Holaaaa

Cómo están además de hermosos/as? Espero que bienn

Finalmente les traje el siguiente capítulo que, aunque para ustedes es verlo de un día para otro, también pasó algo de tiempo desde que escribí el anterior hasta este jsjs

Y bueno, no tengo mucho más que decir, cuídense, coman bien y beban mucha agua

Adiós!<3 

Pd, siento no haberlo subido más temprano, lo olvidé completamente TT

Tra corone👑🗡️ [SeungJin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora