— Seungmin... ¿Que haces querido? — cuestionó admirando la pose extraña en la que estaba su amado junto al "costal de pulgas" llamada Berry
— Nada... Solo... Mm... — respondió avergonzado, había sido descubierto
— ¿Que estás haciendo? — río el mayor
— Es... Yoga... Creo — murmuró bajo
— Te veías lindo haciendo eso, vuelvelo a hacer porfavor
— N-no, mejor hagamos otra cosa — respondió sintiendo que sus orejas se ponían rojas y sus mejillas calientes
— Anda, vamos, hazlo — siguió molestándolo
Los días que llevaban ahí juntos eran los mejores, sus heridas estaban sanas casi por completo y ahora sumando la compañía de cierto animalito la vida de Kim Seungmin era más que feliz
Se sentía amado y protegido entre los brazos de ese hombre, conociendo esa parte de el tan cariñosa, alegre y expresiva jamás creería lo que dicen de el sobre que es un ser despreciable que odia la vida, un monstruo ruin y desalmado que mata, secuestra o hace las más grandes atrocidades por encargó si le llegan al precio
Definitivamente esas dos versiones jamás se llegarían a parecerse
— ¿Sabes?... He estado recordando los días antes de llegar aquí...
— ¿De verdad? — preguntó sentándose al lado del menor
— Cada vez que recuerdo me hago daño pero aún así... Cada vez descubro cosas de las que no me habría dado cuenta antes
— ¿Puedes decirme cómo que?
— Me da miedo saber... La razón del porque ese hombre traía consigo un arma... Estuvo a nada de hacerme cosas malas... Me resistí al inicio y si no hubiera sido por ti, yo... — tomo aire, realmente respiro profundo y prosiguió — Tal vez... Tal vez hubiera sido bueno si me-
—¡Yo no lo permitiría! — exclamó sorprendiendolo — aunque me costará no te dejaría morir a causa de esa escoria, te lo dije antes, te amo Seungmin... Haré todo lo posible porque tengas una vida feliz y larga en el tiempo que tengas de vida
Christopher tomo entre sus manos las de Seungmin, la diferencia entre estás era realmente visible
Las manos de Bang estaba descuidadas, tenían cicatrices, eran ásperas y algo descuidadas
Las manos de Seungmin eran todo lo contrario, eran suaves, tersas y tiernas, las manos de un joven que no tenía que trabajar pero que amaba tocar instrumentos musicales
Totalmente eran diferentes y se veían reflejadas partes de sus vidas
— Te lo aseguro, así logren separarnos nunca dejaré que algo malo te suceda, si tú mueres yo también lo haré, porque mi razón de ser eres tú, mi razón de seguir existiendo es un joven y hermoso chico que ha pasado por cosas difíciles pero aún así ha sabido seguir adelante y no dejarse tendido en el suelo tras caer, mi razón de seguir se llama Kim Seungmin, así que no digas que hubiera sido bueno que te hiriera o que te matará, porque no lo habría sido, escúchame Kim Seungmin, eres el mejor chico que cualquier persona pueda conocer así que no pienses eso de ti.. por favor no lo hagas — murmuró acariciando su mejilla y acercando su frente a la del contrario quien al escuchas esas palabras solo pudo romper en llanto de lo hermosas y emotivas que le parecieron, nunca le habían dicho nada esas palabras que sonaban tan reales
— Quédate a mi lado por favor — pidió en un hilo de voz
— Nunca me iré de tu lado, solo la muerte logrará separarme de ti — dijo abrazando al menor
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.— 'Señor encontramos una nota con el siguiente mensaje "nos vemos en el infierno", estaba en el lugar de los hechos, nos parece extraño y muy conveniente que no la encontrasen antes"
— Bien, voy para allá
— 'También algunos de mis compañeros estan interrogando al chico amigo de Seungmin'
— Dime cuál es su nombre y en qué lugar se encuentran
— 'Yang Jeongin, estamos en la zona restringida alz oeste señor'
— Iré a inspeccionar ese asunto, llegó en treinta minutos, espero y no sean tan rudos con el
—'Venga con cuidado señor '
— Lo tendré, adiós — dijo cortando l llamada llendo al lugar donde se estaría llevando el interrogatorio
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.— Y-ya les dije q-que no se de que me ha-hablan — respondió temblando
— Yang Jeongin, respondemos de una vez, tu eres el único que nos puede ayudar a dar con el, eres su mejor amigo... ¿O no es así? — dijo una mujer de identidad desconocida para el menor quien no entendía como termino ahí
Solo había salido de la universidad y esas personas lo abordaron, lo llevaron con el después decirle que era para ayudar a su amigo y ahora lo torturan verbalmente
— S-si lo soy... Solo que no se...
—¡No evadas mi pregunta!
— Estoy siendo sincero, no lo se
— Vaya amigo que eres — escupió el hombre acompañante de la mujer
— ¡¿Que insinúa?! — gritó ofendido el menor
— ¡NO ME HABLES ASI MOCOSO INSOLENTE! — Gritó el hombre azotando la mesa donde estaban interrogando a Jeongin
Por el estruendo Yang se asustó demasiado, realmente demasiado
— ¡Habla de una vez, mi paciencia se acaba!
— Yo... — más pronto de la que creyó, Jeongin se desmayo
Jamás en toda su vida se imagino verse envuelto en una situación así
— Maldición, llevenlo a un hospital o denle algo
— Lo llevaremos a su casa
— Hagan lo que sea pero llevenselo, el señor no debe de saber esto — demandó el hombre y sus subordinados acataron la orden
— ¿No debo saber que exactamente? — se escuchó la voz del detective, realmente se escuchó molesto por lo que escuchó — ¡Les he dicho que jamás usen ese tono de voz con nadie en un interrogatorio, ni aunque sea al maldito CB97 a quien interrogan! — reclamo enojado
— Lo sentimos — dijeron ambos
— No me interesa, no les creo así que los remuevo de este cargo, tal vez unos meses haciendo trabajo de campo les haga reflexionar sobre sus acciones contra los demás
— ¡Eso jamás!
— Linda, quien da las órdenes soy yo, acepta o vete, de igual modo va para ti — señalo al otro — su actitud soberbia no me gusta para nada, mucho menos a sus compañeros
Ambos se quedaron en silencio esperando las órdenes de su superior
— Váyanse con sus comentarios, espero una disculpa para ese pobre chico, de verdad fue exagerado asustarlo hasta causarle un desmayo
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|| SICARIO || chanmin
FanfictionSeungmin, un chico de familia rica que es ignorado por sus padres, en el punto mas bajo de su depresión decide recurrir a un sicario, al cual le encomienda la misión de acabar con su vida. Christopher, un asesino a sueldo sin escrúpulos ni una pizca...