Capítulo 7: Confundida y agradecida.

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Al día siguiente Minjeong estaba tirada en su cama repitiendo en su mente una y otra vez las palabras de Jimin, se preguntaba qué pasó exactamente ese día para que su amada ya no pudiera confiar en nadie y nisiquiera pudiera emitir palabra alguna. Suspiró descartando la idea de ir a hablar con los padres de la menor pues sabía que no serían receptivos en cuanto al tema.

Era el segundo día de castigo y se sentía mal por no estar para su chica y cuidarla como le prometió.

Extrañaba mucho a Jimin y por más que quería ser su novia, tenerla cerca siempre y hacerla realmente, sabía que primero debía resolver el tema de la confianza entre ambas.

Por otra parte estaba Jimin siendo golpeada por Ryujin como si fuese su mayor diversión. Tenía a la pelinegra en el suelo mientras le pateaba el estómago una y otra vez mientras reía sin gracia.

-Vamos, di algo, estúpida. -Otra patada provocando que Jimin ahogara un grito y se cubriera la cabeza para evitar recibir golpes ahí.

-Dejame jugar, Ryu, prometo no pasarme. -Pedía Jay mientras se tocaba sus partes íntimas. -Nadie nos va a escuchar. -Murmuró en su oído pero la chica negó.

-Ya te dije que no... Aún no. -Dejó de golpearla y se puso a la altura de Jimin para tomarla del cabello y hacer que la mirara. -Quiero verte hoy en mi casa después de clases, no faltes. Te enviaré la dirección por mensaje. -La soltó y luego le regaló una amarga sonrisa. -Nos vamos.

Abandonaron el luga y dejaron a la menor hecha un mar de lágrimas y dolor. Estaba cubierta de tierra y hojas secas pues la había dejado en la parte trasera del colegio, era una zona abandonada. Se puso boca arriba intentando calmarse, su único pensamiento era que había experimentado cosas peores en su vida pero a su vez se odiaba por no ser capaz de defenderse o de siquiera poder suplicar que paren.

Se limpió bruscamente sus lágrimas y se puso de pie entre quejidos silenciosos hasta apoyarse en una pared. Vió como la pantalla de su celular se encendía en el suelo así que se acercó débilmente para tomarlo y ahí se sentó nuevamente, ya no tenía fuerzas. Sin embargo, sonrió al ver que el mensaje era de su rubia favorita en todo el mundo.

Minjeong: ¿Está todo bien? Te extraño mucho, Mimi. Mamá dice que puedes venir a cenar o ir a comer... ¿Te gustaría?

Terminó de leer el mensaje y se sintió mal por solo ser una carga para Minjeong, por no poder protegerla como quisiera pero incluso si no podía, amaba la compañía de la mayor.

Jimin: Ahí estaré. Estoy bien.

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Finalmente el horario escolar había terminado así que Minjeong pensó que sería buena idea preparar ella misma la cena para Jimin, pensó que debía guardarle algo delicioso ya que quería demostrarle todo su cariño y su madre Taeyeon siempre cocina para su otra madre Wendy, se sentía motivada.

Comenzó haciendo la masa para la pizza porque si, haría pizza ya que era la comida favorita de Jimin pero esta tenía algo que el resto no tenía y ese era su ingrediente secreto; amor.

Dejó reposando la masa y se dispuso a hacer la salsa para luego preparar el queso, el tocino y el maíz.

-Esto es más difícil de lo que pensé. -Dijo mientras se secaba las manos. Taeyeon soltó una risita.

-Solo piensa en ella y no será complicado, cariño.

Y así fué. Para la cena Minjeong ya tenía lista la pizza, jugo de mora y un delicioso pie de fresa listos esperando a ser comidos. Lo que Minjeong no sabía es que Jimin no se encontraba camino a casa, por el contrario, estaba sentada en la habitación de otra chica.

Waiting For Her - WirinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora