A medida que las semanas pasaban, la relación entre Olivia y Jordan se afianzaba con cada encuentro y conversación. La conexión que habían desarrollado se sentía cada vez más fuerte, y ambos disfrutaban del tiempo que pasaban juntos, tanto en eventos sociales como en momentos más privados.
Sin embargo, el mundo del fútbol es impredecible y, a menudo, agitado. El viernes por la tarde, mientras Olivia estaba en su oficina organizando algunos documentos para un próximo evento, recibió una llamada que cambiaría el rumbo de su día.
Era un mensaje de Jordan, que sonaba inquieto y urgente.
"Olivia, necesito hablar contigo. ¿Puedes venir al club Santos esta tarde? Hay algo que me preocupa y quisiera discutirlo contigo."
Olivia, preocupada por el tono del mensaje, se apresuró a prepararse y se dirigió al estadio del Club Santos. La ansiedad la acompañaba mientras conducía, preguntándose qué podría estar molestando a Jordan.
Al llegar al estadio, fue recibida por el personal de seguridad y acompañada a la oficina de Jordan. Cuando entró, lo encontró sentado en su escritorio, con una expresión de preocupación en su rostro. Se levantó al verla y la recibió con un abrazo que parecía aliviado pero tenso.
—Gracias por venir —dijo Jordan—. No sabía a quién más acudir.
Olivia lo miró con preocupación.
—¿Qué pasa, Jordan? ¿Estás bien?
Jordan respiró hondo antes de responder.
—La situación con mi contrato está complicándose. Mi agente y el club están en desacuerdo sobre los términos de la renovación, y esto está comenzando a afectar mi rendimiento en el campo. Además, la presión mediática está aumentando, y no sé cómo manejar todo esto.
Olivia se acercó y tomó su mano con suavidad.
—Lo siento mucho, Jordan. No sabía que estabas pasando por esto. ¿Hay algo que pueda hacer para ayudarte?
Jordan la miró con gratitud.
—Solo tenerte aquí ya significa mucho para mí. Necesito tomar una decisión importante sobre mi futuro en el fútbol, pero me está costando mucho concentrarme.
Olivia asintió, sintiendo una oleada de empatía. Sabía que el mundo del deporte podía ser brutal y desafiante, y no quería que las dificultades de Jordan los separaran.
—Quizás sería útil hablar con alguien externo, como un consejero o un amigo cercano, que pueda ofrecerte una perspectiva diferente. —sugirió Olivia—. Y mientras tanto, estoy aquí para apoyarte en lo que necesites.
Jordan le sonrió débilmente, apreciando su apoyo.
—Gracias, Olivia. No sé qué haría sin ti. Realmente aprecio todo lo que haces por mí.
El resto de la tarde transcurrió en una conversación más profunda sobre los desafíos que enfrentaba Jordan y sus posibles soluciones. Olivia lo escuchó con atención, ofreciendo su apoyo incondicional mientras él desglosaba sus preocupaciones.
Cuando finalmente se despidieron, Jordan se sintió un poco más aliviado, sabiendo que no estaba solo en esta lucha. Olivia se fue con una sensación de preocupación, pero también con la firme resolución de estar a su lado durante este difícil momento.
El fin de semana siguiente, Olivia decidió visitar a Jordan en su casa, pensando que podría ofrecerle una distracción saludable de las tensiones que enfrentaba. Llevó consigo una cesta de picnic con algunos de sus platillos favoritos, con la esperanza de que una tarde tranquila juntos les permitiría relajarse.
Al llegar, encontró a Jordan visiblemente agotado pero agradecido por su visita. Juntos prepararon el picnic en el jardín de su casa, disfrutando del buen clima y de la compañía mutua. Mientras comían, Jordan parecía relajarse un poco, y la conversación pasó de temas serios a anécdotas más ligeras y divertidas.
—Sabes, —dijo Jordan con una sonrisa—, siempre que estamos juntos, siento que puedo olvidarme de todo lo demás, aunque sea por un momento.
Olivia sonrió, sintiendo una oleada de ternura.
—Eso es lo que más me gusta de estar contigo. No importa lo que esté pasando en el mundo exterior, contigo me siento en paz.
La tarde continuó con risas y conversaciones despreocupadas. Aunque los problemas de Jordan seguían presentes, esos momentos de conexión y apoyo ayudaban a aliviar la tensión. Olivia estaba decidida a estar allí para él, sin importar los desafíos que enfrentaran.
Cuando la tarde llegó a su fin, Jordan y Olivia se despidieron con un abrazo largo y sincero. Aunque el futuro seguía siendo incierto, sabían que su relación era una fuente de fuerza y apoyo para ambos.
Olivia regresó a casa con una mezcla de esperanza y determinación. Sabía que las tormentas internas de Jordan no se resolverían de inmediato, pero estaba decidida a enfrentarlas juntos, con la confianza de que su amor y apoyo mutuo podrían superar cualquier obstáculo que se les presentara.
Este capítulo profundiza en los desafíos que enfrenta Jordan en su vida profesional y cómo Olivia lo apoya durante este tiempo difícil. También muestra cómo su relación se fortalece a través de la adversidad y el compromiso mutuo.
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ENTRE ESTRELLAS Y SENTIMIENTOS🤍
Roman d'amour💞"Olivia Valentina Córdova Reyes, hermana del famoso futbolista Sebastián Córdova del Club Tigres, está a punto de vivir un romance inesperado cuando conoce a Jordan Carrillo Rodríguez, la estrella del Club Santos. A pesar de sus mundos distintos y...