EL INICIO DE MI FIN

13 3 16
                                    

Esta historia empezó un 28 de junio de 1979,
Nadie creía que al pasar de los años tan rápido ya veríamos  a esta muchacha con 16 años encima, su nombre era Carmen y era tan sensible  su corazón como ella misma, Estuvo bien criada por sus abuelos, los cuales pasaron a merecer el nombre de padres, porque le daban la confianza,la comprensión y el amor requerido.
Una mañana en aquella casa,empezó a contarse la historia del inicio de mi fin,
cuando por las escaleras bajaba asentando bien los pies en cada grada, mi madre,
ella era una mujer muy fría, muy seca y nada sensible, no era justo lo que sucedió aquel instante cuando iban a dar las 12 del mediodía,
mi abuela en el comedor poniendo la mesa, mi madre bajando la escalera,
Y de la nada comenzó a exigirle a mi abuela que me devolviera a sus manos como si yo fuera un paquete, fue tanta la exigencia que mi abuela decidió entregarme a quién pertenecía, dejé atrás 16 años felizmente vividos con aquella mujer que me protegió desde los 6 meses de nacida. Siendo ella también la que me sacó de una fiebre intestinal que me ponía en riesgo de muerte.
Mi madre llamada frialdad,me hizo ocupar como mi futuro hogar
el tercer piso de la casa donde habitaba.
Así,pudo alejarme de mis abuelos subiendo yo a vivir dos pisos arriba y aunque no duró mucho mi estadía ahí,fueron dos años que esperé para salir corriendo ya habiendo cumplido entonces mi mayoría de edad.
Aquellos años quedarán en mi memoria como un shock biológico que nunca desaparecerá ni aunque se lea mil veces, esta historia.
Nunca olvidaré las palabras de mi padre cuando me dijo, oye basura ven acá, lo repitió tantas veces que no había nadie más que yo,
y me dijo que era a mí, que yo tenía que acercarme cada vez que él llamaba de esa forma
Increíble lo que me dijo pero moría porque así fuera y dijo estás muerta para nosotros ya no eres nuestra hija puedes irte,lárgate.
En ese momento sonreí les di las gracias,cogí mis bolsos y bajé tres pisos a abrazar fuerte a mi abuela que realmente se merecía llamarse mi madre.
En ese momento  me volvió el alma al cuerpo, me llene de lágrimas al abrazar a mi abuela lloró conmigo y dijo ya estás de vuelta no llores más te amo hija mía, y justo en ese momento fue donde quise olvidar todo lo vivido, lo llorado, lo sufrido.
Y aunque aquí haya obviado bastante por decir ya que es un contenido muy triste así culmina el inicio de mi fin.

                LA POETA DE LA RED .

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Aug 04 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

la historia míaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora