Maegor Targaryen (Pausado)

Capitulo 30

Maegor finalmente llega a Dragonstone, sintiéndose muy feliz por haber regresado. Elvi se dirige rápidamente a una cueva y entra de inmediato. Maegor observa cómo Elvi aterriza, y comienza a celebrar el hecho de estar de vuelta en casa.

—Muero de hambre —murmura mientras Elvi se desplaza hasta llegar a una zona donde Maegor podría descender— Rytsas.

—Rytsas —los guardianes presentes saludan a Maegor de inmediato y tienen cuidado con el dragón.

—Lykiri Elvi, Lykiri —dice mientras baja de la silla— Sys taoba.

Maegor acaricia a Elvi brevemente y luego comienza a alejarse. Los guardianes se apresuran a buscar algo de comida para el dragón. Maegor se quita los guantes mientras camina por el pasillo, alejándose gradualmente del lugar donde dejó a Elvi.

—Seguramente Jacaerys y Lucerys estarán durmiendo; los veré al amanecer —dice mientras se limpia un poco la cara con un pañuelo que tenía consigo.

Mientras Maegor camina, Rhaenyra es informada de que un dragón ha llegado. Se levanta de su cama y se pone una bata para cubrirse, ya que estaba descansando. Por otro lado, Daemon también es informado de la llegada de Elvi. Él estaba entrenando con su espada cuando Ser Harrold se acerca para informarle sobre la llegada de Maegor.

Maegor llega a la cocina donde dos sirvientes estaban ocupados. Al ver a Maegor, se inclinan y observan cómo el príncipe se acerca para tomar un pedazo de pan.

—¿Le gustaría que le preparemos algo, príncipe? —pregunta uno de los sirvientes.

—Sí, por favor, estoy muriéndome de hambre —responde Maegor mientras termina de morder el pan— Mmm, delicioso.

Maegor se sienta en una parte de la cocina donde hay una mesa a su lado. Los dos sirvientes comienzan a preparar algo para el cansado príncipe Maegor, quien está disfrutando de otro trozo de pan.

Mientras tanto, Rhaenyra y Daemon se cruzan en el camino y van directo a la habitación de Maegor. Al llegar, se dan cuenta de que no está allí, por lo que comienzan a preguntarse dónde podría estar.

—Vine de un largo viaje, podría estar en la cocina —dice Rhaenyra mientras mira a su esposo.

—Vamos a verificar si está allí —Daemon toma la mano de Rhaenyra de inmediato— Necesitamos saber por qué no ha llegado antes.

—Él era el único que faltaba en el funeral —añade mientras comienzan a caminar— Lucerys mencionó que Ser Simón envió una carta, por lo que Maegor debería haber llegado hace unos días.

—Descubriremos pronto por qué no llegó antes —Daemon simplemente besa la mano de su amada esposa.

Mientras caminan hacia la cocina, Rhaenyra simplemente asiente. En la cocina, Maegor observa cómo los sirvientes le entregan un plato de comida que habían preparado esa tarde.

—Aquí tiene, principe —dice uno de los sirvientes mientras le entrega el plato de comida— Espero que lo disfrute.

—Gracias —responde Maegor mientras toma la cuchara— Se ve delicioso.

En ese momento, el otro sirviente le ofrece una copa de agua.

—Lamentamos su pérdida —expresa mientras observa a Maegor— Es lamentable lo que le hicieron al joven príncipe, fue algo realmente cruel.

—Maegor baja la cuchara al escuchar eso— ¿De qué pérdida están hablando?.

—Los dos sirvientes intercambian miradas y uno de ellos comienza a hablar— No está informado, principe.