"Nuestros caminos pueden separarse hoy, pero si el destino está escrito para que estemos juntos, no importa la despedida. Al final, los senderos cruzados siempre nos llevarán de nuevo al mismo horizonte, justo en el momento indicado."
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“Reflexiones de un Joven Pirata”
“Nudos”
*Narrado por Shanks*
Desde que tengo memoria, he vivido en un barco pirata. La vida en el mar no es fácil, y a los cinco años me di cuenta de que este mundo está lleno de riesgos. Cada día en el mar es una nueva aventura, llena de peligros y desafíos, pero también de momentos de gloria y diversión. La camaradería entre la tripulación es lo que nos mantiene fuertes, tanto física como mentalmente. Nos apoyamos mutuamente y nos convertimos en una familia.
Somos una tripulación, la cual debemos protegernos
Recuerdo claramente una vez que Buggy y yo fuimos secuestrados por unos bandidos en una isla donde la tripulación decidió descansar. Nos usaron para amenazar al capitán Roger, pero lo que no sabían es que nuestra tripulación no se doblega ante nadie. Roger y los demás nos rescataron con una facilidad que aún me sorprende. El Haki del Conquistador de Roger hizo desmayar a los bandidos en un instante. Ese día comprendí lo mucho que esta tripulación daría por nosotros. Éramos una familia, y eso incluía protegernos los unos a los otros a toda costa.
Sin embargo, con el tiempo me he preguntado por qué aceptaron a una niña más pequeña que nosotros, una bebé en otras palabras. Shira.
Y se que a mí me encontraron en un cofre después de un gran botín, pudrieron haberme dejado en un isla cualquiera , pero no me adoptaron. Eh igual con Buggy, aunque nosé como fue la manera en como llego.
Pero volvían a Shira apenas sabe muchas cosas, pero no sé que la hace tan linda, tiene esos ojos violetas encantadores que todos parecen adorar. No entendía por qué todos se cautivaban con eso, o con sus pequeñas manos, o esa sonrisita que muestra al agradecer con todo su corazón. Al principio era muy tímida, pero pronto se apegó a Rayleigh más que a nadie.
Me costaba entender por qué todos la adoraban tanto. Incluso Buggy me hizo ver que ella estaba robándose la atención de todos.
No es que sintiera celos, pero era extraño. Shira buscaba intencionalmente la atención de todos y, especialmente, la mía.
Me llamaba por mi nombre una y otra vez, y me pinchaba con su dedo índice en el hombro, el cuello o las costillas hasta conseguir mi atención.
Me hacía gracia cómo pronunciaba mi nombre, cómo me invitaba a tomar té con ella, o simplemente a sentarnos juntos en el nido de cuervos durante el día. Disfrutaba viendo cómo ella jugaba y peleaba con Buggy, y no podía olvidar su curiosidad. Cuando empezó a cantar, su voz chillona se transformó en una cálida melodía que cautivaba a todos.
