capítulo 1

35 3 0
                                    

──¡Eso fue increíble, carajo!

──Lenguaje, Miyeon.── murmuró con el seño fruncido, mirando a sus manos juntas sin intención de separarse.

El partido de basket del equipo femenino de la universidad estaba siendo interesante, bastante movido y entretenido. De hecho, Nicha casi que lo estaba disfrutando. Ella no es fan de los deportes, pero su novia la arrastró a ver la final de temporada porque su mejor amiga jugaría en tan importante fecha.

──Lo siento.── sonrió y dejó un leve beso en sus labios. Era una disculpa falsa en verdad, porque Miyeon llevaba insultando desde que el árbitro inició el partido. Faltaban dos minutos, ella se disculpaba y dejaba un beso cada vez, por lo que Nicha realmente no estaba enfadada con ella.

Miyeon intentó no pensar mucho en eso, pero lo cierto es que le gustaría oír a Nicha maldecir al menos una vez. La tailandesa era toda una niña buena, criada con ideales de ser formal y respetuosa sin importar lo demás.

Con el pasar de los meses en su relación, creyó que Nicha se soltaría alguna vez, sin embargo resultaba que no era ninguna actuación; la tailandesa en verdad no salía de su zona de confort.

Nicha y Miyeon tuvieron sexo varias veces, a la coreana le parecía hermoso que su novia fuera atenta y dulce en ese momento, siempre preguntando y asegurándose de que lo disfrutara. El problema no era que no le gustase, el problema era que ella a veces no necesita que todo sea lento y amoroso, de vez en cuando estaría bien que usara palabras sucias y no cuestione nada, que la tome y la haga suya como Dios manda.

Miyeon creía firmemente que Nicha se estaba reteniendo, tal vez debería decirle que estaba bien sí es brusca.

Pero Nicha se sonrojaba y se ponía tímida a cada rato, con sólo tomar su mano ya lograba ese rojo en sus mejillas. Bien, sería difícil pero no imposible.

Cuando su universidad ganó el partido, Miyeon salió corriendo a abrazar a Shuhua y felicitarla por la victoria. Nicha se quedó unos pasos atrás, sonriente y con su postura firme. Ella era elegante, usando camisas y pantalones de vestir casi siempre.

──No sé mucho pero lo hicieron increíble, felicidades.── la menor en lugar de tomar su mano decidió ir por abrazarla. Nicha se quedó paralizada, no acostumbra a esos tratos con otra gente, pero ver a su novia aplaudir y reír fue suficiente para aceptar el cariño.

──Minnie, es increíble que estés aquí.── soltó la chica después de terminar el contacto.── Me dieron suerte, en serio creí que estábamos jodidas contra ese equipo.

Miyeon notó esa mueca ante la maldición de Shuhua.

──Me alegra mucho verlas felices, espero que disfruten de esta victoria.

──Por supuesto. Tengo que ir por allá, en serio gracias por venir.

Nicha se reunió de nuevo con Miyeon, ambas tomadas de la mano comenzaron a caminar a la salida del gimnasio. Sabían que el equipo no tardaría en hacer su reunión para festejar.

Como todavía no querían separarse, Miyeon invitó a su novia al centro comercial. Quería comer algo y después ver una película en el cine. Fue entonces cuando compraban las palomitas que una idea pasó por su mente.

Agradeció infinitamente a su yo del pasado por elegir usar falda ese día.

dirty talk | miminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora