Resurgimiento

-Eso-, dice Bong Hwan con gran desden, señalando una foto con un dedo indice tembloroso, -ni siquiera es lo que pareces, maldito idiota-.

Por supuesto, no había nadie que lo oyera decir esas palabras. Después de todo, estaba solo en su apartamento, bebiendo alcohol frente a un libro abierto.

En que situación tan jodidamente patetica se encuentra.

Dias después de regresar a su cuerpo en el presente, Bong Hwan no sentia nada mas que felicidad. Estaba de nuevo donde se suponía que debía estar: no mas intrigas palaciegas, no mas atentados contra su vida(no mas de lo habitual, por lo menos). No mas partes femeninas colgando, ni nauseas matutinas, ni putos vestidos largos que milagrosamente no le habían roto el cuello mientras estaba ocupado corriendo de un lado a otro con ellos puestos. Habia vuelto a ser un hombre hecho y derecho, con partes colgantes considerablemente masculinas, muchas gracias, una voz profunda y sexy, y músculos enormes que facilmente podrían avergonzar a los de Cheoljong.

Sin embargo, poco despues de la euforia inicial, los recuerdos de su pasado lo inundaron, y con ellos vinieron sentimientos... nostalgia.

Desear.

Al principio, Bong Hwan intento ignorarlos. Ahora esta decidido a vivir una vida normal, utilizando unicamente sus talentos y habilidades innatas. Estaba seguro, muy seguro, de que no tendría tiempo para sentir sentimientos y esas cosas.

Y, a veces, tenia razón.

Pero había veces en las que se despertaba en mitad de la noche y llamaba a Hong Yeon o a Lady Choi. Se quedaba confundido y no entendia por que parecia que nadie venia. ¿Como se atrevían a ignorar las ordenes de una reina?

Peor era cuando se daba la vuelta y lanzaba un brazo hacia un lado, esperando que cayera sobre un pecho duro, solo para despertarse y darse cuenta...

Mierda.

No es un experto en equipaje emocional porque, en su mayoría, lo regalo y no se quedo con nada para si. Obviamente... Es demasiado genial para esa mierda.

Pero ahora Bong Hwan esta bastante seguro de que lo que siente es que extraña a Cheoljong.

De una manera que le hacia sentir como si todo su pecho estuviera furioso todo el tiempo.

Lo peor es que no puede compartir este hecho con nadie. ¿Quien creería siquiera su historia? ¿Que una vez viajo al pasado, se desperto en el cuerpo de una reina, se enamoro de un rey y cambio la historia en el proceso?

Nadie, ese es.

Fue el quien dejo atras el pasado, como habia rezado y deseado a menudo cuando estaba atrapado en el cuerpo de Kim Soyong.

Entonces ahora que ha cumplido su deseo, ¿por que se siente tan, tan solo?

Bong Hwan bebió su bebida de un trago y miro fijamente la imagen de Cheoljong. -Tienes mucha suerte de estar muerto, porque yo te habría matado.

Por no estar aqui, penso, extendiendo su dedo para trazar suavemente el rostro del Rey.

Por hacerme extrañarte.

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La forma mas facil de solucionar las cosas, por supuesto, era tener citas.

Y salir con alguien es difícil.

Los clubes eran su estilo en ese entonces, por lo que volver a la silla de montar para buscar candidatos potenciales era lo obvio que debía hacer para olvidar y seguir con su vida.