Casuality or destiny?

Capítulo 12

El sol a penas se hacía notorio en la habitación de Ian. Este abrió los ojos y miro el reloj digital, marcaba las nueve y cuarto. Se desperezo y se levantó. Su hermoso cuerpo estaba desnudo, solo traía un bóxer puesto. Tomo su teléfono y reviso el buzón de voz. Tenía un mensaje de su mejor amigo Nate.

*Amigo estoy llamándote desde el baño del avión. Sé que es un peligro para mí y para todos, pero quería avisarte que a las ocho arribo en Charlotte y que a las diez estoy en tu casa. Por cierto la aeromoza, tiene un culo... quizás antes de abordar la traiga a dar un paseo por acá en el baño, saludos bro.*

Ian rodeo los ojos. Nate ya es un caso perdido. Camino hacia la ducha y se despojó del bóxer. Se metió en el chorro y pensó en Paula, en la mañana del hotel, como cuido de él. Pensó que desde ese momento comenzó a sentir cosas por ella, luego pensó en lo de ayer, el baile a la mitad de la calle. Rio. La locura de Paula le causaba sin creerlo amor, porque lo que él dijo en el restaurante frente a todos fue una locura, que hace algunos días diría que estaba tan loco que el manicomio le parecería poco para él. Pero ahora todo es distinto el amor que siente por Paula lo hace cometer locuras, y hacerle saber a Paula que le quiere, no es una locura, es amor. «Mierda. He caído en el amor...» pensó.

Luego del baño, se vistió. Se colocó una bermuda color café, con un suéter cuello V blanco y unas gomas cómodas. Saludo como todos los días a Nietzsche y a Moke. Luego se sentó a esperar el desayuno en el mesón. Mientras esperaba decidió llamar a Paula.

̶ Hola guapa. ̶ sonrió

̶ ¡Ian! Hola, ¿Cómo estás? ̶ le pregunto

̶ Bien, ¿Y tú?, no me digas de tanto bailar hoy te caíste de la cama.

Paula rio al teléfono.

̶ No, no estoy en mi casa. Hoy salimos a un domingo Familiar.

̶ ¿Si?, ¿Dónde están? ̶ pregunto curioso

̶ Estamos jugando golf en el Quail Hollow Club.

̶ ¿Estas usando esas mini faldas que usan las mujeres cuando juegan golf? ̶ le pregunto

̶ Si... ̶ dijo Paula coqueta

̶ Creo que voy a tener que ir para que no te beses con ningún tipo misterioso. Y nadie te mire el culo. ̶ Dijo coqueto

̶ Al único tipo misterioso que quiero besar sos vos. ̶ sonrió

̶ Eso espero nena, porque también quiero besarte.

̶ Es mi turno, luego te llamo para decirte quien gano. Un beso. ̶ le mando un beso por el teléfono

̶ Igual, cuídate.

Luego de eso colgó y se encargó de desayunar tranquilo.

Luego de veinte minutos entro Nathaniel. Ian se levantó y abrazo a su amigo. Tiempo que no lo veía, hace dos meses Nate se fue a recorrer Europa.

̶ ¿Os me habéis extrañado? ̶ dijo con acento Español

̶ Imbécil. ̶ le dijo Ian ̶ ¿Quieres algo?

̶ Si, un buen bourbon. ̶ dijo acomodándose en el sofá

̶ ¿Tan temprano? Eres un duro amigo. ̶ camino hacia el mini bar y preparo dos copas con Jim Beam y se llevó la botella

̶ ¿Qué ha pasado desde que me fui? ̶ tomo la copa que Ian le ofreció

Ian se sentó al lado de él y coloco la botella encima de la mesa baja.

̶ Mucho amigo.

̶ No me digas nada que tenga que ver con el trabajo, mejor dime, ¿con cuántas te has acostado? ̶ le pregunto