🌸Solo conejos 🌸

Bunny Bunny Oliver

🌸En un rincón tranquilo y sereno del bosque, donde los árboles se alzaban como gigantes y las flores llenaban el aire con su dulce fragancia, vivía un pequeño conejo llamado Oliver. Oliver era un conejo joven y curioso, con un pelaje blanco como la nieve que brillaba bajo el sol y unos ojos grandes y relucientes, siempre llenos de asombro por el mundo que lo rodeaba. Aunque vivía en una madriguera cómoda y acogedora junto a su numerosa familia, Oliver tenía un corazón aventurero. Soñaba con descubrir los misterios que se escondían más allá de los arbustos que rodeaban su hogar, donde los secretos del bosque esperaban ser revelados🌸

💗Una mañana, cuando el sol apenas comenzaba a despuntar en el horizonte, tiñendo el cielo de tonos rosados y dorados, Oliver decidió que había llegado el día de emprender una gran aventura. Con cuidado para no despertar a su madre y a sus hermanos, salió sigilosamente de la madriguera. El aire fresco de la mañana estaba lleno de la promesa de nuevas emociones, y Oliver sintió una mezcla de excitación y nerviosismo mientras avanzaba por el sendero cubierto de hojas💗

🌸A medida que se adentraba en el bosque, sus patas pequeñas y ágiles lo llevaban por senderos sinuosos, rodeados de altos helechos y árboles centenarios. Los pájaros ya estaban despiertos, llenando el aire con sus melodías armoniosas, mientras que las ardillas corrían por las ramas, ocupadas recolectando nueces. Todo en el bosque parecía cobrar vida con la llegada del día, y Oliver no podía evitar sentirse parte de esa energía vibrante🌸

💗Después de un rato de caminar y saltar, Oliver escuchó un murmullo suave que lo hizo detenerse. Era un sonido nuevo, diferente a los cantos de los pájaros o el susurro de las hojas. Intrigado, siguió el sonido hasta que llegó a un claro escondido entre los árboles. Allí, ante sus ojos maravillados, se encontraba un arroyo cristalino que corría alegremente entre las piedras, reflejando el cielo azul y las nubes algodonosas. El agua era tan clara que podía ver pequeños peces nadando en su interior, moviéndose con gracia en la corriente💗

🌸Oliver se acercó al arroyo, fascinado por su belleza. Nunca antes había visto algo tan maravilloso. Se inclinó sobre el agua y, por primera vez, vio su propio reflejo en la superficie. Sus ojos grandes y curiosos lo miraban de vuelta, y no pudo evitar sonreír. "Qué conejo tan afortunado soy", pensó para sí mismo🌸

💗De repente, algo brillante en la orilla opuesta del arroyo llamó su atención. Era un destello dorado que contrastaba con el verde profundo del musgo y las hojas. Curioso como era, Oliver cruzó el arroyo de un salto ágil y se dirigió hacia la fuente del destello. Allí, sobre una piedra lisa y húmeda, se encontraba una pequeña rana verde. La rana tenía una piel brillante que parecía cambiar de color bajo la luz del sol, y entre sus pequeñas patas sostenía una flor dorada, tan hermosa que parecía hecha de oro puro💗

✿.｡.:* ☆:**:. La rana, al ver a Oliver, sonrió ampliamente y lo saludó con un tono amistoso.

—¡Hola, pequeño conejo! —dijo la rana con voz suave—. Mi nombre es Lila. ¿Has venido a buscar la flor de los deseos?

Oliver inclinó la cabeza, fascinado y un poco confuso.

—¿Flor de los deseos? —preguntó, acercándose un poco más.

Lila asintió, con una expresión misteriosa en sus grandes ojos verdes.

—Sí, esta es la flor de los deseos. Es una flor mágica que solo aparece en el primer rayo de sol de la mañana y desaparece al mediodía. Aquel que la posea puede pedir un deseo, y la flor se encargará de hacerlo realidad. Pero debes tener cuidado, pequeño conejo, porque los deseos son poderosos, y deben ser hechos con un corazón puro..:**:.☆*.:｡.✿

🌸Oliver sintió cómo su corazón latía más rápido en su pecho. ¿Un deseo? Siempre había soñado con correr más rápido que cualquier otro conejo en el bosque, para poder explorar cada rincón sin ser atrapado por los depredadores o llegar tarde a sus escondites favoritos. Sin pensarlo demasiado, Oliver le pidió a Lila que le entregara la flor.🌸

✿.｡.:* ☆:**:. Lila le pasó la pequeña flor dorada con delicadeza, y al hacerlo, dijo:

—Recuerda, Oliver, el poder de un deseo reside en la intención con la que se hace. No lo olvides..:**:.☆*.:｡.✿

💗Oliver asintió, decidido. Cerró sus ojos con fuerza, sujetando la flor contra su pecho, y con todo su ser deseó poder correr a la velocidad del viento. Sentía cómo la magia de la flor se arremolinaba a su alrededor, un calor suave que llenaba sus patas y le daba una nueva energía. Cuando abrió los ojos, supo que algo había cambiado💗

🌸Sin esperar más, Oliver se lanzó a correr. Al principio, todo parecía normal, pero pronto se dio cuenta de que se movía más rápido de lo que jamás había imaginado. Los árboles pasaban junto a él como manchas verdes, el viento zumbaba en sus orejas, y su corazón latía con una mezcla de alegría y emoción. Oliver corría tan rápido que parecía estar volando, y en ese momento, el bosque entero se convirtió en su patio de recreo🌸

💗Saltó sobre troncos caídos, esquivó arbustos espinosos, y recorrió senderos ocultos que nunca antes había visto. La sensación de libertad era indescriptible. Durante toda la mañana, Oliver exploró cada rincón del bosque, disfrutando de su nueva habilidad. Era como si el mundo entero estuviera al alcance de sus patas, y no había nada que pudiera detenerlo💗

🌸Sin embargo, cuando el sol comenzó a ascender hasta su punto más alto en el cielo, Oliver sintió que la energía especial en sus patas comenzaba a desvanecerse. Se detuvo en un claro soleado, jadeante pero feliz, y miró la flor dorada en su mano. Justo en ese momento, la flor comenzó a brillar con una luz intensa antes de desaparecer en un destello, dejando tras de sí solo un leve rastro de polvo dorado que se desvaneció en el aire🌸

💗Oliver sonrió, sabiendo que su deseo había sido cumplido, aunque solo por un tiempo. A pesar de que ya no podía correr a la velocidad del viento, no sentía tristeza. Había vivido una aventura increíble, había visto partes del bosque que nunca antes había imaginado, y había aprendido algo valioso: lo más importante no es lo que se gana, sino las experiencias que se viven y los recuerdos que se crean💗

🌸Con el corazón lleno de gratitud y una nueva comprensión del poder de los deseos, Oliver emprendió el camino de regreso a su madriguera. Cuando llegó, su familia lo recibió con abrazos y preguntas sobre dónde había estado. Oliver les contó sobre el arroyo cristalino, la rana Lila y lo hermoso que era el bosque más allá de lo conocido, pero no mencionó la flor mágica ni su deseo. Eso, decidió, sería su pequeño secreto🌸

💗Esa noche, mientras se acurrucaba junto a sus hermanos en la cálida madriguera, Oliver cerró los ojos y se dejó llevar por los sueños. Soñó con futuros días de aventuras en el bosque, sabiendo que siempre habría nuevos misterios por descubrir y nuevas maravillas por experimentar. Porque, al final, lo que hacía que la vida fuera tan especial no era la magia de una flor dorada, sino el simple placer de explorar, aprender y, sobre todo, vivir con el corazón lleno de alegría y curiosidad💗