29 de Febrero, 1980
Lafayette, Indiana-Los Angeles, California
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Ya llevamos un día viajando, estábamos atravesando el estado de Oklahoma, al principio sólo teníamos que atravesarlo sin hacer paradas hasta que llegáramos a un Motel o algún lugar donde descansar y ponerle gasolina al coche.Sin embargo Isbell y William tuvieron una discusión, no fue la gran cosa, pero si lo suficiente como para que William decidiera irse en autobús el resto del camino hasta Los Angeles, así que ahora solo seriamos Isbell y yo.
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Ya habíamos dejado a William en donde tomaría el Autobús hacía Los Angeles, eran alrededor de las 8:35 de la noche, y estábamos en la carretera buscando en donde descansar. Isbell, William y Yo, habíamos compartido diálogos entre nosotros durante el viaje, nos llegamos a conocer aún más así como también nuestras metas, y que haríamos en Los Angeles ya que solo Isbell y William eran lo suficientemente mayores como para al menos conseguir un empleo.
-Oye Isbell, ¿te puedo preguntar algo?
-Claro.
- Siento un poco raro siempre llamándote "Isbell" o "Jeff" así que me preguntaba si te ¿podría decir "Iss"? o algo similar a ese apodo, también te podría decir "Izzy", no lo sé. Dime que te parece.
-Me parece bien, me puedes llamar por "Izzy", me agrada demasiado, aunque puedes llamarme como tú gustes hermosa.Sonreí involuntariamente a su comentario, no se si fue por que me dijo "Hermosa" o porque ahora le podría llamar por un apodo, el cual a mi me parece que cada vez nos tenemos más confianza entre nosotros, me hace tan feliz.
Ya habíamos llegado al Motel. Jeff le puso gasolina, mientras yo fui a al Motel a esperarlo. No sacamos las maletas, por lo que dormiríamos con la misma ropa o tal vez en ropa interior o con alguna camisa encima, no lo sé.
Entre al motel, el cual no se veía en tan mal estado, el lugar entero estaba siendo iluminado por una luz cálida, la cual hacía ver cómodo el lugar, al menos para mi, cosa que también me trae una buena sensación de tranquilidad y felicidad a mi.
-Hola, Buenas Noches, ¿Cuál es el precio por una noche?
-Buenas Noches, el costo sería de 15$ dólares.
-Entonces, pagaré por una noche- dije sacando el dinero de mi cartera.
-Que tenga una linda noche- dijo la recepcionista dándome unas llaves junto con el número de habitación.Salí de la recepción en busca de Izzy para poder ir a descansar. El había estacionado el coche en el estacionamiento del Motel. Izzy se encontraba recargado en su coche fumando. Se veía tan guapo.
Me daban ganas de solo llegar corriendo a besarlo apasionadamente. Pero sabía que eso no pasaría, al menos no hoy, ya que ambos estamos cansados y muy probablemente ni él ni yo tengamos el valor de hacer eso, aún.-Hola Izzy, ya tengo las llaves de la habitación, así que vamos a dentro.
-Esta bien, yo te sigo- dijo, solo esperaba que me siguiera, o que fuera detrás de mi. Por lo que no esperaba que el tomara mi mano.
Entrelace mis dedos con los de el, y el siguió mi movimiento. Sonreí como tonta, me tiene loca de amor.Llegamos a la habitación, la cual era la 115 y se encontraba en el segundo piso del Motel. Al entrar a la habitación el frío desapareció. En la habitación había dos camas individuales con sus respectivas mesitas de noche , una pequeña mesa con dos sillas, un guardarropa con dos cajones, y un mueble grande con una Televisión.
Tan pronto como entramos, Izzy se tiro a la cama, pues estaba cansado de todo el día.
Yo me senté en la otra cama, pensando si ya irme a dormir o hablar con Izzy un rato más.
Después de unos minutos de seguir divagando entre mis pensamientos, Izzy se paró de la cama.
No habíamos bajado nuestro equipaje, teníamos la opción de dormir con la misma ropa o en ropa interior, por lo que cuando Izzy se paró de la cama empezó a quitarse sus zapatos, y seguido de esto procedió a quitarse la mayoría de su ropa, para finalmente quedar en Bóxer y su playera encima.
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Bailando con el destino|Izzy Stradlin
Fanfiction1980, Indiana En el lienzo de una juventud encadenada, una bailarina prepara su fuga. Un encuentro con el espíritu libre de un chico de su preparatoria, Jeffrey Dean Isbell, enciende la mecha de la rebeldía. Juntos, se lanzan a la ciudad de Los Áng...