── 𝗉𝗋𝗈𝗏𝗈𝖼𝖺𝗍𝗂𝗏𝖾 ୨୧ 𝗵𝗲𝗲𝗵𝗼𝗼𝗻

𖹭 . 𝗎𝗇𝗈

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ᡣ𐭩  provocative  !!

La vida de Sunghoon era perfecta desde el momento en que nació, padres presentes y amorosos, lo habían criado con toda la ternura y el amor del mundo, le daban todo lo que quería, no podia quejarse de su vida, era muy feliz.

Hasta que su felicidad se vió interrumpida cuando Sunghoon cumplió 12 años, su madre falleció por una rara enfermedad dejándolo solo con su padre y a decir verdad, después de eso es como si no tuviera uno, su padre se convirtio en un hombre frío, serio y muy ocupado.

Ya no pasaban tiempo juntos, las cenas eran solitarias y lo único que tenía era estudiar, el tiempo en la escuela era lo unico que podia hacerlo olvidar su situación por unas horas.

Dos años después su padre volvió a casarse, esta vez con una mujer bastante joven, más que él, esta ya tenia una hija tres años mayor que Sunghoon, él pensó que esto sería algo bueno, por fin tendría alguien con quien pasar el rato y a pesar de que era pronto nunca le reprecho nada a su padre, tenía derecho a rehacer su vida.

Nada fue como él creía, las dos primeras semanas fueron buenas pero pronto empezaron a mostrar su verdadero rostro, después de que su padre se iba a trabajar en la mañana empezaba su infierno.

La señora mishel y emily lo obligaban a limpiar toda la casa, lavar la ropa de todos sin poder usar la lavadora, ya que decía que la ropa podría arruinarse y por eso debía lavarla a mano, también tenía que cocinar, planchar y acomodar todo.

Debía arreglarle las uñas solo por capricho, porque luego de que terminaba con ambas ella se levantaba y decía.

— Esto es una porquería Sunghoon, nisiquiera puedes hacer nada bien, maldito bastardo.

Lo escupía y se iba al salón de belleza junto con su hija, por lo menos tenía paz cuando no estaban, rogaba que su padre volviera y lo defendiera.

Su hermanastra no era mejor, lo obligó a cambiar de habitación por que la suya era más grande, le quitaba el dinero que su padre le daba para sus gastos y la escuela, lo humillaba y lo tenía como su esclavo.

Sunghoon nunca dijo nada, nunca se quejó, sabía lo que ocurriría si llegaba a decir una sola palabra, lo había intentado antes y había sido golpeado y menospreciado.

Su madrastra y su hija le habían dicho a su padre que había vuelto así de la escuela, su padre sin tiempo y mucho menos energia, lo creyó todo.

Los años pasaron y Sunghoon creció, ahora con 19 años podía defenderse correctamente, había dejado de ser su sirviente y había podido recuperar su habitación, ya no podían meterse con él, toda la ternura que había en su ser había sido transformada en odio, rebeldía y egoísmo.

Emily había anunciado en la cena que traería a su novio a casa, su madre estuvo muy feliz y orgullosa, Sunghoon sólo se rió y dijo.

— Pobre hombre, no sabe el error que cometió.

Mishel y Emily lo miraron con enojo, ambas lo hubieran maldecido de no ser por la presencia de su padre, aprovechaba estos momentos para burlarse sin que pudieran decir nada.

— Hijo no digas eso, tu hermana es una buena chica, cualquier hombre estaría encantando de salir con ella.

Emily sonrió con burla y le agradeció a su padre, incluso lo llamaba papá, la perra se atrevía.

— Ya veremos, entonces avísame cuando venga, me pondré mi mejor ropa y ahora me disculpan pero no puedo seguir comiendo esta mierda.

A Mishel se le quiso reventar una vena del enojo, su lengua picaba por insultarlo pero optó por calmarse, era lo mejor si quería la mitad de la fortuna de su padre.