Helpless but dangerous

Capitulo 15| Trato

Mucho tiempo antes...

—Philza—

Un balde de agua helada me empapo, arrastrándome de mi inconsciencia hacia la realidad. Tosí en un intento de sacar el agua que había entrado en mi nariz y levanté la vista borrosa hacia el sol pálido, nada más que una luz cincelada en el cielo grisáceo, interrumpido por las ramas de los pinos. Alguien me tiro del pelo, algunos mechones de cabello me caían sobre los ojos, goteando. Un graznido parecido a una risa burlona se escuchó de fondo, muy alejada, haciendo eco.

—Despierten al cerdo también —ordenó alguien.

Di una bocana de aire que raspo mi garganta, intentando respirar. Mire hacia un costado, el mundo se movía muy lento. Mi ojo derecho escocía en un dolor leve por el impacto en el suelo que había sufrido. Escuche un golpe sordo y después otra risa que hizo ruido acompañado de murmullos sin sentido. Techno estaba en el suelo... Lo que había pasado volvió muy rápido a mi mente.

Habíamos ido a buscar agua, aún recordaba lo que habíamos platicado a espaldas de Dream antes de adentrarnos en el bosque.

»—No los perdimos, Phil. —me dijo Techno con la voz demasiado tensa— Van a venir y vamos a tener que pelear y el maldito no la pone fácil...

—Tenemos que movernos más rápido que ellos pero Dream no está en condiciones para eso... —Me lleve una mano a la barbilla, por el rabillo divisé la porcelana de la máscara y un trozo de sonrisa. Si Quackity estaba buscándolo aun no era por las fallas sino por algo más, el códex—. Descansemos, déjalo pensar... No se ve bien. Volveremos antes de que lo noten.

Techno estuvo de acuerdo conmigo, a medias al menos. Antes de ir a buscar un arroyo me volví hacia Dream, quien parecía sin vida, sin nada de emoción. Incluso cuando habíamos convivido en la cabaña él tenía la costumbre de... quedarse quieto, como un venado a las luces de las antorchas. Era espeluznante por que no sabía si estaba escuchando o no, y ya no podía discernir que es lo que él pensaba o que pasaba por su cabeza. Siempre tan espontáneo y misterioso. Como un muñeco de trapo. En constante silencio.

—Quédate aquí, Techno y yo iremos por agua... —Tentar el terreno..., probarlo así no era agradable. Al no recibir respuesta me di media vuelta y amarre a los caballos al mismo tronco en el que Dream había tomado de asiento— Volveremos en un momento. No te alejes.

Mientras Techno y yo nos sumergíamos en el bosque, me di cuenta de la picazón que parecía estarle siseando en el brazo.

—¿Qué te pasó? —pregunté, señalando con un dedo su brazo.

—Cuando estábamos en el cañón me apretó los brazos demasiado fuerte pero estoy bien. Tiene un agarre duro.

—¿Seguro que estás bien? —Asintió.

—Jamás lo había visto tan... asustado —dijo Techno con la voz baja y ronca. Estaba de acuerdo, había visto como Dream se aferraba a él tan fuerte que pensé que le iba a romper el brazo. Como si supiera.

Techno se rascó por encima de la tela.

—Está mierda... —Se subió la manga y creo que palidecí cuando vi cuatro surcos de dedos encajados en la piel del antebrazo, había uno más ancho, proveniente del pulgar en el costado, en el interior, las lineas eran de color morado, casi negro completamente. Techno suspiro para calmarse, sus ojos se ensombrecieron—. No le vamos a mencionar esto a nadie, ni siquiera a Nikki... o a Dream.

—Parece una quemadura —musité.

No habíamos hablado de lo que pasó en la cabaña, no parecíamos estar dispuestos a eso. Esa magia... Ese poder tan caótico e indómito.... Aún podía sentir la oscuridad tan parecida que había entrado en mi cuerpo como una serpiente, sumergiéndome por solo unos momento cuando casi ahorque a Dream o cuando hizo explotar la cabaña, haciéndola añicos. Intente no pensar en eso. La magia no era rara, lo que sí era raro era que alguien pudiera evocarla con naturalidad, como un sexto sentido.