CAPITULO 2

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Bitácora del Capitán:

El sistema de comunicaciones falló hoy. He intentado repararlo desde la cabina, pero no hay manera de establecer contacto con el exterior. Esto no puede ser una coincidencia. Estoy seguro de que él es el responsable. Siento cómo la sombra se cierne más cerca, acechando cada movimiento.

He pasado horas intentando restablecer la conexión. Cada intento fallido aumenta mi frustración. La sensación de aislamiento se intensifica, y con ella, el peso de la soledad. Pienso en los otros, en los que podrían estar buscándome, sin saber que estoy atrapado aquí, luchando contra un enemigo invisible.

Mis manos tiemblan mientras trabajo en los circuitos. La desesperación y el miedo se entrelazan, creando una tormenta dentro de mí. Necesito salir de aquí, pero cada esfuerzo parece empujarme más hacia el abismo. No puedo rendirme, no puedo dejar que gane.

Bitácora del Intruso:

El aislamiento es esencial. Hoy saboteé el sistema de comunicaciones. Sin contacto con el exterior, su desesperación crecerá. Puedo sentir su frustración, su impotencia. Es un placer observar cómo se desmorona poco a poco.

Lo vi trabajando en los paneles, sus manos temblorosas y su rostro pálido. Cada intento fallido de restablecer la conexión lo lleva más cerca del borde. Este es solo el comienzo. Hay tanto más que puedo hacer para quebrarlo.

La nave es mi campo de juegos, y él es mi presa. Mantenerlo aislado es solo el primer paso. Su mente ya está empezando a desmoronarse, y pronto, su cuerpo seguirá. No tiene idea de lo que le espera.

Fin de la bitácora.

El capitán y el intrusoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora