Kim Taehyung despertó. Abrió sus ojos y miró su entorno. Su cuarto sin ningún solo cambio y su pantalla de 70 pulgadas encendida junto con su ps7. Buscó su celular para mirar la hora, y se encontró con su iPhone 17 pro Max con la alarma que recién empezaba a sonar. Eran las 7:30 de la mañana. Pensó en dormir un poco más, cuando abrió los ojos de golpe recordando que era pobre y no tenía ni en que caerse muerto.
—¿En dónde estoy? —Se preguntó Taehyung a sí mismo.
Y es que no recordaba haber dormido con su pareja la noche anterior. En realidad no recordaba siquiera haber salido de su departamento.
—Taehyung ven a desayunar. —Dijo la voz de una mujer.
Picado por la curiosidad. El bajó de la cama y se aproximo a la puerta, quedado asombrado de la enorme casa donde se encontraba. Bajó por las escaleras, guiado por el delicioso aroma que emanaba de donde creía, se trataba de la cocina. Una vez ahí, se encontró con la figura de una delgada mujer, muy bien vestida, quien se encontraba de espaldas hacia el, en dirección a la estufa. Ella se dio la vuelta y Taehyung sintió un vuelco en el estómago al ver de quien se trataba: Era su madre, quien se suponía debería estar en prisión por violencia familiar y maltrato psicológico.
—¿Qué haces aquí? —Preguntó Taehyung con el ceño fruncido.
—¿Cómo que que hago aquí?, yo vivo aquí.
—¿Entonces qué hago yo aquí?
—Cariño, tu también vives aquí. —Dijo la mujer, colocando la comida frente a él.
—Yo no vivo aquí. Yo tengo mi propio departamento.
—Creo que aun sigues dormido, cariño. Tu siempre has vivido aquí conmigo. ¿Por qué no comes para que se te quite el sueño?, se te hará tarde para el trabajo.
—No voy a comer nada que venga de ti. —Dijo Taehyung, moviendo la comida hacia un lado —. No confío en que no esté envenenada.
—¿Perdón?
—¿Qué es todo ese ruido?
Taehyung escuchó la voz de su padre y se volteo de inmediato.
—¿Papá?
—Claro, hijo. ¿Quién más si no?
Taehyung lo veía fijamente, sin poder creer que realmente su padre se encontraba ahí.
—Familia, ¿cómo están?, no me lo van a creer, pero mire que había un salmón gigante de oferta en el supermercado y no pude evitar comprarlo para cenar salmón ahumado. —Habló su padre de nuevo sin quitar la sonrisa de su rostro.
—¡Papá! —Gritó Taehyung de nuevo aferrandose a su padre en un fuerte abrazo.
—¿Qué sucede hijo? —Preguntó su padre devolviendo el abrazo.
—Nuestro hijo ha estado un poco extraño el día de hoy. —Respondió la madre de Taehyung sin quitar la sonrisa de su rostro —. Creo que ha estado soñando por mucho tiempo.
—Quizá un paseo en su camioneta nueva lo anime un poco.
—¿Camioneta? —Preguntó Taehyung, aun sin poder procesar absolutamente nada de lo que estaba pasando.
—Tu padre pensó que lo mejor era regalarte una camioneta, puesto que tu audi ya estaba muy gastado.
—¿A-audi?
—Si. Ya tenias dos años con el. Demasiado tiempo.
—Amor. Dejemos de hablar y vayamos a desayunar. Que nuestro hijo debe tener mucha hambre.
