capítulo 36: El fin de la venganza

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Mientras las cancelaciones y escándalos seguían su curso, Minho se sentaba en su casa, viendo la televisión y leyendo artículos con una mezcla de sorpresa y indiferencia. No conocía a las personas involucradas y no se sorprendió mucho, ya que sabía que en el mundo siempre pasaban cosas parecidas.

Después de terminar su trabajo, salió a buscar a Haneul, recordando que era su cumpleaños. Ya había preparado un regalo especial para él en casa.

Llegaron a su hogar juntos y Minho le dijo: Quiero que veas algo en mi estudio de arte.

Haneul: Me pregunto qué será

Minho sonrió y sacó la sabana que cubría la pintura. Haneul quedó asombrado ya que esa pintura era de Minho y él, esa pintura se veía complicada de hacer pero para Minho era lo fácil del mundo.

Haneul: Me encanta, es hermoso

Minho: Me alegra que te guste, lo hice pensando en ti

Haneul se acercó a Minho y lo abrazó, dándole un beso.

Haneul: Te amo

Minho: Yo también te amo

[Minho pensó: Es el mejor cumpleaños que podría haber tenido, con el hombre que amo]

[Haneul pensó: Me siento tan afortunado de tener a Minho en mi vida, es el hombre perfecto para mí]

Minho y Haneul se abrazaron un rato más, disfrutando del momento y de la pintura que Minho había creado para él.

Mientras tanto en otro lado:

Do-hyun llamó a Kwang-sun y le dijo: Amigo, tanto tiempo como estás? Imagino que no tan bien porque vi las polémicas en las que te metiste.

Kwang-sun respondió: Sí, tienes razón, no estoy para nada bien. Debemos vengarnos y yo vi que el que está detrás de esto es Jae-hyun y Tae-ho. Así que tenemos que hacer que Jae-hyun esté de nuestro lado y Tae-ho será fácil de terminar con él si tenemos a Jae-hyun de nuestro lado.

Do-hyun acuerdo: De acuerdo, le aviseré a Chin-hwa para que nos juntemos en mi casa y hagamos el plan.

Kwang-sun colgó y preparó sus cosas para irse de Japón, el país en donde estaba viviendo por ahora. Por suerte, nadie sabía quién era porque el escándalo solamente estaba en Corea y no en otros países.

Mientras tanto, Do-hyun llamó a Chin-hwa y le dijo: Chin-hwa, necesitamos hablar. Kwang-sun y yo estamos planeando algo para vengarnos de Jae-hyun y Tae-ho.

Chin-hwa: ¿Qué es lo que planean? Estoy dispuesto a ayudar.

Do-hyun: Vengan a mi casa y les explicaré todo. Kwang-sun ya está en camino.

Chin-hwa: Está bien, voy hacia allá.

[Do-hyun pensó: Ahora que tenemos a Kwang-sun y Chin-hwa de nuestro lado, podemos empezar a planear nuestra venganza].

En la casa de do-hyun:

Do-hyun: Podemos hacer un artículo y hundir la carrera de Tae-ho, el deportista en natación.

Kwang-sun: No, debemos hacer algo peor, como matarlo o casi hacerlo y dejarlo con heridas graves.

Chin-hwa: Eso es una buena idea, Kwang-sun. Será mejor que hagamos eso.

Do-hyun: Bien, hagamos eso y tendremos que contactarnos con Jae-hyun. Gracias a alguien, sé que es un abogado algo conocido, así que vamos a buscarlo por alguna parte.

Era casi de noche y los 3 chicos fueron a buscar a Jae-hyun. Jae-hyun iba a comprar algo a una tienda cercana cuando se topó con ellos. Los llevó a un callejón y habló con ellos.

Do-hyun: Jae-hyun, tenemos una oferta para ti. Queremos que nos ayudes a hacer algo a Tae-ho y te ofrecemos una gran suma de dinero.

Jae-hyun recordó su venganza y cómo estaba a un paso de hacer que Tae-ho se convirtiera en su verdugo. No podía confiar en esos 3, ya que sabía cómo eran.

[Jae-hyun pensó: No puedo dejar que me conviertan en un asesino. Tengo que mantener mi plan original y no dejar que me distraigan].

Sin aviso previo, Jae-hyun golpeó a Kwang-sun en la cara y escapa, tirando un contenedor de basura y haciendo que los 3 chicos lo pierdan de vista.

Kwang-sun: ¡Ay! ¿Por qué lo hiciste?!

Do-hyun: ¡Jae-hyun, vuelve! ¡No puedes dejar que nos hagas esto!

Chin-hwa: ¡Vamos a encontrarlo y le vamos a hacer pagar!

[Jae-hyun pensó: He logrado escapar, pero sé que esto no ha terminado. Tengo que estar preparado para lo que venga a continuación].

Jae-hyun se reunió con Tae-ho y le contó lo que los 3 chicos habían intentado hacer. Tae-ho se enfureció al escuchar la historia y decidió que era hora de tomar medidas.

Tae-ho: ¡Es hora de que sepan lo que es la justicia! ¡Vamos a hacer que paguen por lo que intentaron hacer!

Jae-hyun: Estoy de acuerdo. ¡Vamos a hacer que se arrepientan de haber intentado hacerme daño!

Mientras tanto, los 3 chicos habían encontrado la casa de Jae-hyun y pensaron en ir a matarlo. En la noche, cuando llegaron allí, vieron a un montón de periodistas que los esperaban.

Kwang-sun, sin pensar, sacó un cuchillo de su mochila, pensando que podría usarlo para matar a Jae-hyun. Pero no se dio cuenta de que los reporteros y periodistas estaban allí y captaron todo.

Los periodistas: ¡Espera! ¡No pueden hacer eso! ¡Están intentando cometer un asesinato!

La policía llegó rápidamente y rodeó a los 3 chicos, que estaban armados y con trajes para cometer el crimen.

Kwang-sun trató de ocultar el cuchillo, pero no sirvió de nada. Los policías los arrestaron inmediatamente y los llevaron detenidos.

[Los 3 chicos pensaron: ¡Esto es el fin! ¡No podemos escapar de la justicia!]

Mientras tanto, Jae-hyun y Tae-ho se sentaban en su casa, sonriendo y riendo al ver cómo los 3 chicos se desmoronaban.

Jae-hyun: ¡Ha llegado el fin! ¡La justicia ha sido servida!

Tae-ho: ¡Sí! ¡No pueden hacer daño a nadie más!

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