Confesión

Batido en inglés

Arturo

Camino a la escuela de mi hija. De lejos miro a un niño, no más de 10 años a lo mejor, con un cartel.

Llego y el niño me mira, se ve tierno y se nota tímido. Voltea atrás un segundo, sigo su mirada me encuentro con el.

—Marlon tiene una duda, una pregunta importante. Quiere saber si le gustas.— el niño extiende el cartel que dice. Hola lindo. Y muchos corazones y colores rosas.

—¿Que edad tenemos? ¿15?— reí por sus palabras desviando mis ojos a el de nuevo.

Me esta mirando, tiene una caja de en su mano derecha lo que me hace alzar una ceja seguido de entrecerrar los ojos. Sospechoso.

Se está acercando con mi hija atrás...

¿Que carajos hace mi hija atrás?

—Hola papi— me saluda con su sonrisa de siempre, sin mostrar sus dientes. El me mira y se agacha.

—O-oye debes dejar ese hábito de agacharte frente a mi— lo miro dando un, dos pasos atrás.

—Perdón, ten, es un anillo.— abro los ojos un poco e intento sonreír.

—¿Un que?

Se levanta y agarra mi muñeca la acaricia, pone la caja observando cada movimiento, sus dedos se quedan más tiempo como tapando en un caparazón de sus palmas mi mano con su caja.

—Sal conmigo

Susurra dejándome sin habla, acerca el caparazón de sus manos a su pecho, siento sus corazón latir rápidamente, frenético, me doy cuenta que el mio esta igual y que los dos paso que di atrás los reverti.

—¿A-a donde vamos a ir si acepto?— quita una mano de su caparazón para ponerla en mi espalda, me pega a su cuerpo y suspiro, quiero dar esos pasos atrás de nuevo pero me contengo.

—Donde quieras— nos acercamos de a poco, sintiendo nuestro aliento. Me voy atrás, ansioso, nervioso.

Hago mi propio caparazón de su caja con mi anillo dentro. Anillo, carajo me dio un anillo.

—Va-vamos al Kentucky.

—Bien, paso por ti mañana a las 6:30— su sonrisa me contagia. Asiento mirándolo alejarse.

—Eh, papá— Elisa me jala del saco. Cerebro regresa en sí.

Volteo con mi hija que me mira raro. Vergaaa, ¿Nos habrá visto?

—Papi, ¿Estás bien? Estás tomate.

La abrazo por no contener mi vergüenza.

—Callate Elisa.— ella se ríe.

-...-

Ah puta madre chingan a quien parió a mi hija carajo.

Se me olvido que mi Dominic se venia a mi casa. Corrección, Dominic vendrá a mi casa.

Bueno el punto, acabo de recibir un mensaje de mi amigo queriendo saber como que traer de comida porque no tiene dinero para pollo Kentucky o para su puré o para sus panes con esa mermelada de dioses griegos.

Así que si, es culpa de él por derepente ponerse todo así. Ni siquiera recuerdo bien que pasó.

¡Mi hija!

Voy a la sala, donde no hay nada en la tele porque esta castigada. Solo está aburrida mirándola apagada.

Analizo su respiración, dormida. Vuelvo a sentarme a la cocina qe esta justo a un lado de la sala, ¿Realmente acepte ir al Kentucky con el?

Pero mi hija esta enamorada de él.

Aunque dijo que lo quiere olvidar.

Pero lo dijo apenas ayer, ¿Se supone que ya lo haya olvidado? ¿Haya existe?

Suspiro estirado los labios.

—Ahora te llamare... Riardo— salto, es mi hija moviendo sus dedos de arriba a bajo. La miro sospechoso, su sonrisa aparece.

—Tío dom dijo que vendrá mañana.— su sonrisa de siempre no parece la de siempre. Vuelvo a hacer mi mirada de sospecha y ella hace lo mismo. De tal palo tal astilla dicen.

—Ajá, ¿No quieres que vengan?

—Jsjs no papá, no es eso, solo decia— vuelve a sonreír y sale de la cocina.

Lo decidí, no iré.

Ahora tengo que esperar a que el aparezca en mi casa, bien vestido, probablemente en traje y peinado, me mirara decepcionado pero como es paciente me sonreirá y me dará el regalo que tiene para mi y se irá. Tan dramático, tan guapo.

Bueno, quizás valla un rato.

🪶🏺🧭

Stranger things~~

Tuiii~~ ah! Amo escribir con música, es tan perro relajante.

Muchos besos, lamento la tardanza, ando por completo bien yap.

Y perdón por la hora de actualización xd

Modificado (?)