Nota treinta

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Tal vez en otra vida podamos estar juntos.

Tal vez en otra vida podamos amarnos tal y como lo prometimos.

Tal vez en otra vida tenga el valor para aguantar un poco mas.

Tal vez en otra vida si llegue a tiempo junto a ti.

Tal vez en otra vida si nos casamos.

Tal vez en otra vida las peleas no sean tan constantes.

Tal vez en otra vida no este tan rota.

Tal vez en otra vida, no me de por vencida de esta manera.

Fue lo que pensé esa tarde, antes de tomar un frasco de antidepresivos con una botella de alcohol destilado.

Cerré mis ojos y lloré.

Lloré por que me despedí de todos, de mis hermanas, de mi madre, de mis amigos...

Pero no de ti... No tuve el valor suficiente como para hacerlo.

Por eso, después de muchas horas, cuando abrí mis ojos y me di cuenta que seguía respirando... hablarte fue lo primero que hice.

Estoy llorando mientras escribo esto... Porque recuerdo tu rostro y tu voz cuando te conté lo que había hecho, como viniste a buscarme a mi casa para llevarme a urgencias, como lloraste a mi lado mientras me decías que tu también merecías una despedida.

Y si lo hacías, tú merecías mas que eso.

Merecías que yo siguiera luchando un poco mas.

Merecías mucho mas que estar preocupado en una sala de espera o en el trabajo mientras yo estaba en el hospital siendo atendida por el área de psiquiatría.

Aun mereces mas de lo que yo pude ofrecerte en ese momento.

Pero también sé que yo merecía pasar por eso.

Necesitaba darme cuenta que el suicidio no es la solución y que en realidad, yo si quería vivir

Solo que no había encontrado los motivos necesarios...

Si alguna vez llegas a leer esto, gracias por haberme salvado ese 13 de agosto.

Gracias por haber sido ese rayo de luz en mi vida.

Gracias por no abandonarme cuando yo solo quería darme por vencida.

Gracias por quererme.

Gracias por darme motivos para quedarme.

Un ultimo intentoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora