Nunca antes había estado tan asustada y sola como esa noche en el hospital, por lo que agradecí que no me dejaras de hablar en toda la noche, incluso los intentos que hiciste por verme.
Preguntandome si tenia frio, si mi celular aun tenia pila, si tenía hambre, sed, etc.
Incluso estuviste ahí cuando me dejaron ir a casa al dia siguiente en la mañana.
Cuando salí, estabas ahi de pie, me guiaste a tu auto y me llevaste a tu casa.
No quería estar sola en la mía.
Y tú no querías dejarme a la deriva otra vez.
Cuando entramos, no había nadie.
A esa hora tu esposa salía a trabajar.
Así que me sentaste en tu sofá y juntos empezamos a leer los papeles que me habían dado.
"Diagnóstico: Intento de suicidio con ingesta de medicamentos"
Acariciaste mi pelo después de un momento.
-¿Sabes que te quiero verdad?- Preguntaste con un susurro.
-Lo sé- Respondí con la voz gangosa por tanto llorar.
-No se si pueda seguir con esto.
Un silencio absoluto se adueñó del momento.
-Entiendo- Trague el nudo de mi garganta y deje que mis lágrimas fluyeran- De verdad perdón.
-No puedo estar con alguien asi... ¿pensaste en mi siquiera? ¿en como me iba a sentir? ¿o tus hermanas?- Lloré en silencio.- Te quiero mucho, pero no tienes idea de cuanto me dolió saber lo que hiciste.
Asentí con la cabeza, entendiendo tu punto de vista.
Nadie quiere estar con una persona que piensa en morir todos los días.
-¿No dirás nada?
Hubieron largos minutos de silencio antes de que yo respondiera.
-Te amo- Dije - Te amo con todo mi corazón- Te mire con el rostro lleno de lagrimas- Porfavor no me dejes, no lo hagas.
Tomaste mi rostro y besaste mis labios, mientras también llorabas.
-Yo tambien te amo, asi que no me dejes solo.- Hiciste que apoyara mi cabeza en tu pecho y acariciaste mi cabello.- No puedes dejarme.
Ambos no habíamos dormido nada, tu por el trabajo y la preocupación.
Y yo porque no había dejado de llorar mientras me suministraban el suero.
Así que fue inevitable el dormirnos después del sexo.
Despertamos horas después, me acariciaste el cabello unos minutos mas antes de que yo volviera a mi casa.
Si alguna vez pasaste por algo asi, o quieres darte por vencida, déjame decirte una cosa...
Por favor quédate.
Porque te aseguro que hay por lo menos una persona que está dispuesta a escucharte, hay una persona que le importa tu vida.
Y aunque la gente te diga depende de ti el querer salir de ese fondo oscuro, se que no es fácil.
Es por eso que, ojala no olvides que con solo el hecho de despertar, de abrir tus ojitos cada mañana es un
Felicitaciones
Es un
Pudiste
Es un
Estás acá
Y no tienes porque irte.
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Un ultimo intento
RomansaPido perdón por como mi corazón suspira por quien pertenece a alguien más.