¿Una vida normal para un héroe?

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Me encontraba en el patio de entrenamiento del castillo de Hyrule sentado en una banca mientras observaba a mis compañeros entrenar; el sonido de las espadas chocando retumbaba cada vez menos en mis oídos mientras en mi mente repetía una y otra vez la lista de compras que tendría que ir a comprar después del entrenamiento...

-¡Link entras a pelear!-

Ese grito me saco de mi viaje astral, reconoci fácilmente la voz del capitán ordenandome agarrar mi espada y escudo.

-Este será tu último combate el día de hoy, después podrás irte a casa y disfrutar de tus dias libres-Yo asentí en modo de respuesta poniéndome en posición de batalla. Era verdad, después de este entrenamiento podría irme a casa, a Hatelia, donde estaría con mi familia por un mes entero disfrutando de mis vacaciones.

El capitán chifló en señal de iniciar, inmediatamente mi rival comenzó a lanzar estocadas en diferentes ángulos mientras yo las esquivaba con algo de dificultad, seguimos así un buen rato hasta que note que empezaba a perder energía y fue ahí donde aproveche para comenzar atacarlo a diestra y siniestra hasta hacer que bajara la guardia por el cansancio y cuando tuve la oportunidad le regrese un ataque suyo con mi escudo provocando que bajara la guardia y pudiera barrer una de sus piernas provocando que perdiera el equilibrio y cayera al suelo.

El capitán chifló nuevamente pero esta vez en señal de terminar el combate, me dirigí hacia mi compañero y le extendí la mano para levantarlo a lo que él la acepto.

-Gracias Link- Respondió el amablemente.

Yo solo asentí en respuesta. Para después despedirme del capitán y retirarme del patio del castillo...

El bullicio de los civiles se escuchaba a mi alrededor junto con el rítmico sonidos de los cascos de mi caballo chocar contra el suelo mientras me dirigía a la tienda, las miradas de todos se detenían en mi cuando me venían pasar;Y ni hablemos de las chicas, asi que acelere el trote de Sultán para poder salir de ese lugar tan incomodo; Desmonte de mi caballo a un lado de la tienda, y ataba la cuerda a un poste.

Entre a la tienda e inmediatamente saque la hoja de papel que tenia guardada con la lista de cosas que tendría que comprar.

-Leche, queso, pan, arroz, hongos de Hyrule, trigo, azúcar de caña, zanahoria, calabaza y manzanas... Las manzanas puedo recolectarlas en el bosque y ya no tendría que gastar más rupias-murmure para mi mismo.

Me apresure en recoger todo lo que necesitaba y me dirigí al mostrador.

-Muy bien, serian 258 rupias en total-Respondio la cajera con una sonrisa.

Yo le entregue una rupias dorada y después me devolvió mi cambio.

-Muchas gracias, vuelva pronto-

Yo solo me limite a asentir con la cabeza. Y salir lo más rápido de ahí...

El viento chocaba contra mí cara y ondeaba mi cabello, era en esos momentos en los que me sentia libre, mientras me dirigía al bosque que esta en las afueras de la ciudadela.

Desmonte de mi caballo y me dispuse a trepar varios árboles para arrancar manzanas de sus ramas y cuando tuve una cantidad suficiente decidí que era momento de regresar a casa...

Después de 2 horas de viaje finalmente llegué a mi hogar, cruce el portal que marcaba el inicio de la aldea Hatelia y salude al señor que hacia guardia.

-¡Que bueno volver a verte Link!- Exclamó con alegría mientras detenía el trote de Sultán y estrechaba manos con él.

-Lo mismo digo Thade- Respondí con la misma alegría.

Una vida contigo (Link x Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora