XVIII

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Seis años habían pasado desde que se escondió en su hogar para nunca más salir y cinco desde que prohibió la toma de fotografías a su persona, se sentía tan liberado pero a la vez tan prisionero, si el mismo no podía entender lo que sentía ¿Quién más lo iba a hacer?

En esas fechas comenzaron sus noches de insomnio, con el tiempo aprendió a vivir con ellas pero al principio eran una carga pesada, cada noche sentía ansiedad al no poder dormir y cuando por fin lograba hacerlo un inmenso dolor de estómago lo atormentaba.

En una de esas noches de desesperación no durmió y se levantó justo al amanecer, corrió por todo el reino sin rumbo fijo, iba a detenerse antes pero no lo logró y cayó de lleno en el lago.

No sabía nadar... Pensó que era su fin y por un momento llegó a sentir alivio  hasta que su cuerpo fue sacado del agua.

Al abrir los ojos ya en la orilla rodeado de pasto se encontró con aquella chica pelinegra, con su cabello atado en trenzas y totalmente empapado, la conocía y se sentía avergonzado de que lo viera en esa situación tan decepcionante.

- Bokie...

Dijo Dahyun en un susurro, observándolo desde arriba.

- No me mires, no lo hagas.

Se levantó y se sentó abrazando sus piernas mientras sentía la intensa mirada de la chica.

- Me queda claro que no quieres que te miren... ¿Que te parece hablar sin mirarnos?

Así lo hicieron, se sentaron de manera que cada uno le diera la espalda al otro pero que pudieran escucharse al hablar.

- ¿Que sientes Bokie?

- Vergüenza

- ¿De qué?

- De mí, de quién soy.

Dahyun sonrió sin emoción, era triste que aquel ser lleno de luz tuviera esos pensamientos hacia él mismo cuando todos los demás lo veían con admiración.

- ¿Cuándo nacieron esos sentimientos?

- Cuando... Cuando fui a dar una de mis visitas fuera, unos chicos me dijeron lo que realmente piensa la gente de mi... Me abrieron los ojos.

Dahyun rió, Yongbok estuvo a punto de levantarse pensando que esta se estaba burlando también de él.

- Yongbok, ellos no te abrieron los ojos... Te los cerraron, te consumió la idea que ellos querían crear en ti, lograron su cometido.

- ¿A qué te refieres?

- Cuando una persona siente envidia de la luz en lugar de admiración, deciden tratar de apagarla porque saben que nunca lograrán tener una igual... Tu luz es hermosa pero la estás ocultando bajo la cama, sabes perfectamente que la luz se saca para alumbrar a los que la necesitan.

- No te creo.

- Es obvio que no, sólo no lo olvides. Que esos pensamientos no se conviertan en tu todo, porque tú eres todo Yongbok.

Se levantó para irse del lugar sin hace caso a lo que Dahyun le dijo, la miró para despedirse de ella.

- Por favor.

Dijo Dahyun en un susurro, Yongbok le dió una sonrisa triste y luego se marchó para no volver a encontrarse con ella por muchos años... Sin embargo ahora allí estaba, charlando nuevamente con ella y abriendo nuevamente su corazón.

Recuperaron el tiempo perdido, le contó muchas cosas a las que se tuvo que enfrentar desde la última vez que se vieron, hasta que llegó un nombre al tema: Hyunjin.

Fotografía Prohibida - HyunlixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora