day 5

112 9 4
                                    

_____________

Qué culpa tiene la distancia
de que al amor le guste lo
Imposible.

Elena poe.

ART by: piradt

_____________

( Este cap, se centrará más en la perspectiva de Stolas )

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


( Este cap, se centrará más en la perspectiva de Stolas )

2 semanas antes.

La gente aplaudía y los participantes que ganaban se iban recorriendo hacia la semifinal de aquel concurso de canto.

Vassago y Stolas presentaban mientras que los jueces seleccionaban. Era una secuencia en bucle, en la cual el príncipe no estaba tan atento debido a su obvia desviación de atención a cierto diablillo que había visto hace apenas unos segundos en el camerino.

No iba negar los inevitables estragos que había echo en su corazón las acciones del menor. Se sentía tan estúpido al su voluntad querer volver a perdonar al imp, era un triángulo tan tóxico en lo cual lo único constaba en:

Pelear.
Cojer en forma de reconciliación.
Estar bien.

Teniendo ese factor en cuenta era evidente que no debío esperar mucho de aquel arreglo que tenían, tal vez su querido Blitz ya tenía muy en cuenta la posición en la que lo había colocado su situación pasada, y tal vez, él también debería tomar en cuenta cual era su parte en aquel arreglo que habia existido en cláusulas exclusivamente verbales.

Los líos en su cuerpo y mente eran enredaderas que por más que quisiera no lograba desenredar, comprenderse a sí mismo, el porqué de todos los sucesos ocurridos hasta ese preciso día.

Una mirada perdida tenía en su rostro debido a su evidente desespero. No prestó mucha atención cuando se les otorgó un pequeño descanso a cada uno, sus pasos eran tumultuosos, con una cara de pocos amigos.

Estaba jodido.

Llevo con fatiga sus manos a su rostro para frotarse los ojos. Sus suspiros eran en un agujero de inexpresividad. Su figura tan desaliñada recostada sobre aquel sofá mientras hacía un intento por darle un principio y un fin a todas las razones y causas que tenía en su mente.

Fue entonces que la puerta de su camerino se abrió entre un chillido sumamente agudo. Era su excuñado quien asomo tenuemente su cabeza mirando a Stolas con una sonrisa en su rostro, una sonrisa vanidosa que dejaba en evidencia aquel recelo en ella.

–¿Podría pasar?– Soltó recargandose en la perilla de la puerta.

El menor se acomodo mejor en su lugar mirando con un atisbo de confusión y terror al contrario.

– Técnicamente ya estas dentro, ¿que necesitas?.– Espetó tocando el puente de su pico con estrés.

El otro solo termino de abrir la puerta con una pequeña risita ante el comentario.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Oct 11 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

ONLY 6 RULES// STOLITZDonde viven las historias. Descúbrelo ahora