Mis 3 escapes de chikito

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Esta anécdota la trasladé de mi cuenta @IzuruKamakuraJP para acá hasta conseguir inspiración para escribir y salir del bloqueo XD Se van a cambiar leves detalles para conectar con futuras anécdotas (ponerles apodos a gente y lugares)

Multimedia para que se den una idea de como era yo a esa edad.

Empecemos con un poco de contexto.

En ese momento yo estaba viviendo en un pueblo relativamente chico en el medio de un campo (vamos a llamarlo Springfield porque era como Springfield en Los Simpsons pero con falta de urbanización y sin planta nuclear) La escuela primaria a la que iba (apodada en este libro la primaria 420) tenía alrededor de 200 alumnos, y tenían una regla no escrita de "a menos de que haya una emergencia, cada maestro se ocupa de sus propios alumnos", lo cuál me dejaba con solo dos adultos a cargo mio, la maestra de mi grupo (la Amarga) y la maestra de necesidades especiales (la Encantadora de Perros porque flasheaba que ese era su trabajo)

Una cosa que yo tenía de niño eran 2 modos, "tranquilo y digno de vivir en sociedad" y "gremlin rabioso". Los adultos que me conocían identificaban eso, pero cometían un error. Pensaban que era una situación de Jekyll y Hyde (un lado más cruel del mio donde yo pese a tener responsabilidad por mis acciones perdía el control), cuando era más como Batman (si bien dejaba salir mis emociones negativas, ambos son una cara de la misma moneda que trabajan en conjunto porque nunca dejaba de ser yo)

El horario era desde las 8:00 AM a las 12:00 PM, cuatro horas (importante para que tengan en cuenta el tiempo del escape) y además vivía a unas pocas cuadras, por lo cual tenía permiso de volverme a casa solo.

El último dato importante es cómo está estructurada la escuela. Hay dos patios cerca de la entrada del frente con los salones para los preescolares y los baños, y uno enorme atrás con la cancha frente al resto de salones. Había un patio atrás de esos salones, pero ahí no podían entrar los alumnos. El patio prohibido.

Con todo esto aclarado, empiezo a explicar mi primer escape.

Era un viernes, en el medio del año, el último día de clase antes de las vacaciones de invierno. Ese día estabamos teniendo una fiesta, sin uniformes ni mochilas.

La fiesta me parecía una verga. No tenía amigos, los juegos me aburrían, no entendía porqué estaba ahí si no ibamos a tener clases, y lo único que puedo juzgar hasta el día de hoy siendo adulto fue que solo tenían jugo multifruta para tomar (no, no había ni agua)

Por el momento, yo había decidido aceptar a las malas y no quejarme, comiendo papas fritas y galletitas y hablandole a dos dos peluches chiquitos de perros (Pluto Nosoy y Toblo) El único motivo por el que aguanté fue porque me dijeron que iba a haber comida rica a partir de las 8:20 (me acuerdo ese detalle porque después hice un dibujo tipo plano de la escuela y para esconderlo le puse muchos paso a paso de operaciones con esos números y lo metí en el cuaderno de matematicas)

En el salón multiuso tenían un reloj, y yo en un momento me impacienté y me colé ahí para mirar cómo andaban. Todavía faltaban unos minutos, pero cómo ahí tenían una cocina, decidí meterme a ver qué tenían de comer. Sin hacer ruido, miré y me dí cuenta del peor horror que era consiente que tenía a esa edad... Solo darían hamburguesas con huevo frito.

Yo estaba horrorizado, odiaba (y sigo odiando pero de forma racional) el huevo frito, y en esa escuela tenían mucha actitud de "¿cómo se te ocurre qué no te guste la comida sana y no la comas?", y sabía que no me dejarían tirarlo de lado o enchufarselo a otro. En mi cabeza en ese momento, eso justificaba irme a la mierda. Y lo hice.

Primero, me fui del salón multiusos, pensando cómo salir. Descarté la entrada principal, la reja tenía candado y tenían la mesa para la comida muy cerca. Después descarté otra puerta más chica a un costado, esa también tenía un candado. Luego miré para atrás y se me ocurrió salir por el patio prohibido. Ahora, no podía solo dar la vuelta y salir, no solo creía que así se iban a dar cuenta al toque, pero aparte a esa edad me obsesionaba la idea de jugar al escape de prisión, tenía que hacerlo emocionante. Así que el plan fue ir hasta la otra punta de la escuela y ahí si fugarme.

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⏰ Última actualización: Aug 25 ⏰

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