Única parte

239 14 11
                                    

(Grandioso el vídeo. Si quieren, escuchen la canción mientras leen, se siente bien así si lo haces, no obligatorio)

...

Engel iba caminando en los pasillos tranquilamente. Iba directo a su salón de matemáticas sin ninguna intervención.

♪⁠~Se apareció en mi ventana~♪

Vió a un chico con melena blanca de rodillas, parecía que lloraba o estaba mal.

Se desvío de su habitual caminata para verlo. Como es su naturaleza curiosa y amable, se acercó para ver si debía ayudarlo.

—¿Hola?—
Dijo un poco suave y bajito para que sólo lo escucharán ellos dos.

—¿Eh? ¿Q-Qué quieres rarito?—
Al parecer, aquel chico era uno de los Bullys, siendo Edward su nombre.

—Vi que estabas ahí tirado, parecias llorando–
Edward soltó una risa un poco fuerte pero forzada.

—¿Creés que soy como tú? Yo no lloro. Eso es para maricas y ando muy bien–

—No te vez muy bien que digamos—

El del pelo largo se veía en un mal estado físicamente y ni hablar mental.

Tenía unas ojeras no tan visibles, se notaba cuanto tiempo no había dormido. Sus ojos estaban rojos quizás por llorar recientemente. Tenía varias manchas moradas al parecer fueron golpes que sufrió. Su pelo parecía un poco maltratado.

Alguien abusó físicamente de él.

Engel sintió tristeza verlo en ese estado y que él lo negué para verse "hombre" lo jodía más.

—Pff, mejor vete a molestar a alguien. Dejame solo–
El alto no le hizo caso y fue a ayudarlo a levantarlo.

♪⁠~La acogí con mucho amor~♪

Edward intentó evitar la ayuda del contrario aunque por el dolor no pudo hacer nada.

—Ven, vamos a la enfermería—
No dijo nada y se dejó llevar. Engel sólo lo cargó tipo al estilo princesa.

Llegaron, siendo atendidos por varios enfermeros que al ver el estado del chico de los lentes, se alertaron por lo mal que estaba.

Después de un rato, salió por fin con varias pomadas y vendas en su cuerpo.

Cuando salió vió al de las plumas esperándolo afuera.

Él lo estaba esperando.

—¿Y bien?—
Se acercó lento.

—¿Ah?—

—¿Me dirás qué paso?—

—No te dire nada, ni se por qué estás aquí–
Se negó a contarle, iba a seguir así un buen rato.

♪⁠~No alzaba vuelvo, era huraña~♪

—Bueno, te ayudaré a ir a tu clase, ¿ok?–

—Bien—
No le quedó de otra que aceptar su ayuda, sin él no podía caminar.

♪⁠~Me sentí su protector~♪

Lo agarró del brazo para ayudarlo a caminar, él sólo se apoyaba.

Tuvieron suerte que ambos tenían la misma clase. Entraron y pusieron una escusa falsa que Edward se había hecho daño. Todos se quedaron mirando a esos dos, menos alguien.

Paloma Ajena [|𝙴𝚗𝚐𝚎𝚕 𝚇 𝙴𝚍𝚠𝚊𝚛𝚍|]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora