My boy only breaks his favorite toys - Taylor Swift.
« Once I fix me, she's gonna miss me »
─── ∙ ~εïз~ ∙ ───
Nerviosa era una descripción insuficiente para lo que realmente sentía Marcela. Su corazón latía desbocado, acelerado por la ansiedad. El simple pensamiento de volver a ver a Betty después de meses la atormentaba, devorando su alma y matándola lentamente. Su mente estaba inundada de preguntas sin respuesta: ¿Cómo estará? ¿Me mirará? ¿Me ignorará? Marcela sentía que su cabeza giraba a mil por hora, mientras el mundo a su alrededor parecía indiferente a su tormento. Nadie allí había extrañado a Betty como ella, ni nadie compartía el temor de que la mujer de lentes que atravesaría esas puertas no le dedicara ni un simple segundo de su atención.
«Seré feliz con una simple mirada suya», pensó la pelinegra, cerrando los ojos por unos segundos.
Ninguno de ellos podía imaginar que estaba sintiendo realmente la pelinegra, quién miraba ansiosamente las puertas.
—Tranquila —le murmuró Armando, dándola una corta mirada.
Marcela la miró de reojo, y suspiró.
—Estoy tranquila —respondió, no muy segura de sus palabras.
Armando soltó una ligera risa, que rápidamente disimuló con un carraspeo al sentir la atención de varios ojos sobre ellos. A veces olvidaban que siempre estaban en el centro de las conversaciones de los empleados; al parecer, la relación entre Armando y Marcela era una fuente constante de rumores y especulaciones.
—Pues no lo pareces —señaló, dándole un trago al café que había pedido—. Te ves tensa, y desde que llegaste no has dejado de golpear tus dedos contra la mesa —alzó una ceja.
Marcela se detuvo, mirando sus manos sobre la mesa. Hizo una mueca al saber que el hombre tenía razón.
—Yo...-estoy muriendo —contestó, jugando con los anillos en sus dedos—. Siento un nudo en mi garganta. Necesito verla —susurró, esperando que nadie además de Armando la escuchara.
Por suerte, todos parecían bastante entretenidos en sus conversaciones como para prestarles atención.
Armando sonrió, y asintió, intentando buscar las palabras correctas para calmar a su...¿amiga? ¿examante? Ahora no importaba. Lo único que quería era quitar esa expresión de angustia en el rostro de la mujer. Le dolía verla tan afectada.
¿Qué podría decirle?
Pero las palabras no fueron necesarias, las puertas de la sala se abrieron de par en par, dejando ver a tres personas.
El aire abandonó los pulmones de Marcela al ver a Beatriz en el marco de la puerta, examinando a cada uno de los presentes en la sala de juntas. Beatriz había cambiado tanto que parecía una persona completamente diferente a la Betty que había abandonado Ecomoda. La mujer que ahora se encontraba frente a ellos no era la misma que había besado repetidas veces en su auto frente a su casa.
Su cabello, suelto y algo ondulado, caía en rizos suaves sobre su rostro. El flequillo había desaparecido, permitiendo que sus rasgos se destacaran más. Había perfeccionado sus cejas, se había maquillado, y sus brackets ya no estaban. Además, llevaba unas gafas más pequeñas y modernas. Su vestimenta también había cambiado: ahora llevaba un traje ajustado de color azul marino que acentuaba sus caderas, revelando las curvas que sus anteriores prendas escondían, y que Marcela había tenido el privilegio de conocer personalmente hace algunos meses.
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one shots » marcetty. [AU]
Fiksi Penggemar"AU" significa "Alternate Universe" (Universo Alternativo) historias cortas sobre Marcela y Betty (marcetty), personajes de la novela "Yo soy Betty, la fea." bienvenides a mi historia, disfruten! - rainy.