El vaivén del autobús provocado por el cambio de pavimento me despertó. Adormilado, no pude evitar que la comisura de mi boca se elevara. Mabel y yo estábamos cerca de Gravity Falls.
Escuché al chófer soltar un par de maldiciones debido a la intensidad del ajetreo. La frase del pueblo: "¡No hay nada que ver aquí, amigos!" Tal vez era una excusa del gobierno de Oregon para reducir el presupuesto invertido en la carretera.
La cabeza de mi hermana descansaba sobre mi hombro y, sobre mi chaleco, noté una mancha de humedad, creada por su saliva que se extendía al punto de casi tocar mi camisa color gris.
Buscando evitar eso, la agité suavemente.
-Oye, Mabel. Ya casi llegamos.
Despertando de golpe, movió su cabeza de tal modo que uno de sus frenillos se atoró con uno de los hilos sueltos de mi viejo chaleco y accidentalmente lo desgarró.
Cuando se dio cuenta de lo que hizo, se sonrojó y me miró, expectante de mi reacción.
Suspiré divertido y me lo quité.
-¡Lo siento, Dipper. Te haré uno nuevo, lo prometo! -gritó mientras buscaba en su mochila su kit para coser.
-No importa, Mabel.
-¿Estás seguro? -preguntó, mientras levantaba una ceja.
De repente, de uno de los cierres de su equipaje, sacó con agilidad su pistola-gancho y me apuntó.
-¡¿O acaso eres un fantasma de este autobús embrujado que acaba de tomar el cuerpo de mi hermano?!
-¡¿Estás loca?! ¡¿Quieres que nos bajen del camión?! -grité entre susurros, bajando con un dedo el cañón del arma.
Noté qué el conductor estaba más concentrado en esquivar los terribles baches que en el estruendo de los únicos pasajeros (nosotros).
-¡Ya sé, Dip-dip! -aclaró jugueteando con el sombrero de Wendy que reposaba en mi cabeza.
Rodé los ojos y me lo acomodé de vuelta.
-Pero, en serio, perdón por lo de tu chaleco. -se disculpó cabizbaja.
-Sabes, Mabel... Es un nuevo verano -expliqué sonriendo-. Quizá sea hora de deshacernos de lo viejo, ¿no?
El cerdo de Mabel, Pato, gruñó desconcertado desde el asiento trasero y me miró con cierto pánico.
-¡Tú no, cerdito!- dijo Mabel mientras acariciaba su cabeza.
Contento con la situación, respiré.
Habían pasado tantas cosas desde las vacaciones pasadas. Salvé a mi hermana de unos gnomos salvajes, luché contra fantasmas, me enamoré, maté zombis, sobreviví al fin del mundo...
Aunque también está nuestra vida en Piedmont, que habría sido normal, de no ser por el divorcio de nuestros padres.
Mabel y yo sufrimos mucho al enterarnos, sin embargo, concluí en que ambos tomaron la decisión correcta; puesto que tanto mi madre, como mi padre, han cambiado sus vidas para bien.
Mi mamá empezó a hacer ejercicio, subió de puesto en su empleo y pasa sus tardes haciendo jardinería en la casa donde vivíamos todos, con Mabel diseñando y dibujando las macetas para sus plantas.
Mi papá consiguió un mejor trabajo, se mudó a un cómodo departamento, retomó su pasión por escribir y pasa más tiempo con nosotros, a veces viendo películas con los dos, o jugando videojuegos conmigo.
Se sentía tan bien saber que todo había acabado, y ahora estábamos aquí de regreso a nuestra ciudad favorita.
Mientras veía hacia el horizonte, vi la característica
cordillera partida por aquel OVNI y que se unía por un puente de madera.
ESTÁS LEYENDO
Otro Verano De Misterios
Fanfiction"Um, ¿hola? ¿Esto funciona...? Oh, sí. Aquí Dipper, eh... Pines. Ahora mismo Mabel y yo estamos a una hora de llegar a Gravity Falls. Tengo 15 minutos antes de que mi hermana necesite otra de sus dosis de azúcar, así que solo diré esto. ¡Estamos de...