Hilos de un Corazón No Sanado

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Maldito sea el momento del trágico día que te conocí,

Iluminaste por donde pasabas, y tu sonrisa a mi ser llamaba,

Enamoraba, encantaba, apreciaba, calentaba,

En fin, sinónimos de que te amaba...


Quizás me equivoqué, pensé que tu ser era lo que por siempre más anhelaba,

Pero no, cuando dije que te amaba, tan solo el pasado recordaba,

Porque hoy si me preguntas, creo que ni te amo, ni siento nada,

Porque de quién me enamoré, fue de tu ser en el inicio de conocerte, a ese tú, yo amaba.


Tan solo cambiaste y no eres más ese ser que creí conocer,

Simplemente cambiaste y deslizaste nuestro amor por un hilo colgante,

Hoy no sé ni lo que siento, solo sé lo que sentí,

Hoy no sé si vivo o solo sueño ser feliz.


En tus ojos vi lo que en otros no, una locura para mí,

Pues no notaba diferencia en un sistema materializado por señores de traje gris,

Y hoy día, creo que me equivoqué pensando en lo que pensaba de ti,

No me acordé que tus ojos son marrones, los ojos más comunes en cuanto a colores.


Quizás sea el día de mirar a un costado,

De que tú sigas tu ruta y yo caminar por el cordón bordado,

Sacando los pocos hilos que quedan en mi corazón no sanado,

Haciendo que de una vez por todas muera, y deje de andar rodando.


Descociendo mi cerebro - PoemarioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora