- Ven Katherine vamos a jugar- Dijo un niño pequeño, mientras le gritaba a alguien desde. el patio de juegos.- ya voy- dijo una niña más pequeña que aquel niño. Ella empezo a correr con todas sus fuerzas a donde el niño le habia indicado. Por lo que veo esa niña se llamaba Katherine igual que yo... eso significa que ella es..
.- ¡Ya voy a llegar, espérame! - Grite mientras me levante bruscamente de la cama , dejando a mi madre un poco confundida.
- ¿ A donde quieres llegar Katherine? - pregunto mi madre mientras se reía.
- ¿ Así que fue solo un sueño? - dije en voz baja
- Katherine ... hoy tienes que asistir al instituto ... ¿ recuerdas?- Dijo mi madre mientras separaba las cortinas dejando ver un rayo de sol que atravesaba la ventana y daba directo en mi rostro.
- Es verdad... Debo estar lista en el menor tiempo posible.- balbucee mientras me frotaba los ojos para aclarar mi vista.
Mi madre salió de mi habitación con rapidez.
Me levanté de la cama y me coloque mi bata de baño, en ese instante me acorde de aquel sueño que tuve, ese chico que me llamaba a jugar con el, siempre soñada con ese niño tan extraño, siento como sí en algún momento lo hubiera visto.
Entre al baño y me saque la ropa al mismo tiempo que colocaba mi toalla a un lado. Abrí la ducha e inmediatamente salió fría el agua lo que hizo estremecer mi frágil cuerpo. Termine de bañarme, y me dirigí a mi habitación mientras mis chanclas rechinaban contra el piso húmedo lo cual me fastidia demasiado.
Cerré mi puerta y abrí mi armario para buscar la ropa que me iba a colocar. Me puse mi uniforme que incluía una chaqueta azul oscuro con el escudo del instituto , unas bailerinas , una camisa blanca que decía mi nombre en la parte posterior derecha, medias enterizas del mismo color que la chaqueta y una falda que llegaba hasta las rodillas . En mi opinión era muy elegante así que no me quejo.Me peine un poco mi cabello y lo deje suelto.
Baje a desayunar y mi madre me esperaba con un rico desayuno que incluía pancakes con miel de maple, jugo de naranja, y queso parmesano. Realmente amo a mi madre, la considero una amiga, a quien le puedo contar mis cosas y me entiende, sabe lo que me gusta y lo más importante ... Siempre esta ahí cuando la necesito.
- Lo cocine especialmente para ti- dijo mi madre mientras me invitaba a que me sentara en la mesa.
- gracias madre, eres la mejor-le dije a mi madre mientras tomaba un sorbo del jugo de naranja que tanto me gustaba.
El desayuno simplemente estaba delicioso, me lo comí con mucho agrado.
Mire mi IPhone para saber que hora era y según mi teléfono eran las 7:30 ,no puede ser, ¡Voy tarde!
Me levanté de la mesa y le agradecí a mi madre por el desayuno y luego agarre mi mochila en menos de un segundo- ¡Adiós madre, que te vaya bien en tu trabajo!- grite desde la puerta de mi casa.
Salí a la calle y escuche unos gritos provenientes de mi casa, volteé mi cabeza y desde lejos pude ver a mi madre corriendo con una carpeta ... carpeta... ¡ Oh por dios como puedo ser tan distraída y dejar mi carpeta tres semanas seguidas !
- Dejaste tu carpeta ... Otra vez- dijo mi madre mientras recuperaba el aliento. Se notaba que había corrido demasiado. Le debo muchas.
- Gracias... tratare de no ser tan distraída- Le prometí
- bueno... Corre antes de que llegues tarde - Dijo un poco afanada
Mi madre tiene que llegar temprano a su trabajo ... trabaja como enfermera en una clínica muy lejos de nuestra casa... sin embargo, ella siempre llega temprano a su trabajo , pues hace poco se compro un muy bonito y cómodo carro, el cual le facilita llegar rápido a su trabajo todos los días sin embargo algunas veces llega tarde a casa.
Me despedí de ella agitando la mano mientras corría desesperadamente en dirección al instituto.
-Por fin llegue - me decía a mi misma una y otra vez. Esto es increíble... llegue justo a tiempo.