Yu Tu se encontraba en un rincón apartado del mundo humano, mirando hacia el cielo estrellado. Sus alas doradas relucían bajo la luz de la luna, y su mente estaba fija en un solo pensamiento: su ansiado regreso al cielo.
Sin embargo, la voz de su padre, el Ser Celestial, interrumpió sus pensamientos.
Ser Celestial: —Yu Tu, aún no es momento para tu regreso. Tienes una misión que cumplir.
Yu Tu suspiró, su paciencia a punto de agotarse.
Yu Tu: —¿Otra misión? ¿Por qué no puedo simplemente volver al cielo? Ya he demostrado mi valor.
Ser Celestial: —Tu regreso está condicionado a esta tarea. Debes salvar a Shen Miao, una joven que sufre de una profunda depresión.
Yu Tu frunció el ceño, claramente irritado.
Yu Tu:—¿Salvar a Shen Miao? Según el libro de las almas, ella está vinculada a la muerte de muchas personas en un incendio. ¿Por qué debería salvar a alguien con una historia tan oscura?
Ser Celestial: —El libro muestra solo una parte de la verdad. Si tomas esta misión, descubrirás lo que realmente ocurrió.
Yu Tu se quedó en silencio, contemplando la oferta. Su deseo de regresar al cielo era inmenso, así que finalmente asintió.
Yu Tu: —Está bien, aceptaré la misión. Pero si voy a hacerlo, lo haré a mi manera.
Con un destello de luz, Yu Tu se encontró nuevamente en el puente donde Shen Miao estaba a punto de caer. La vio tambalearse y extendió sus alas doradas para atraparla justo antes de que cayera.
Shen Miao:(con asombro) —¿Quién eres tú?
Yu Tu:(con una voz calmada) —Soy tu ángel guardián.
Shen Miao miró a Yu Tu y no sabía si reir o llorar al ver que él impidio su muerte.
Shen Miao:—Un ángel... Pero, ¿por qué eres tan arrogante si eres un ángel?
Yu Tu se quedó en silencio por un momento, luchando contra su impulso de responder con arrogancia. Finalmente, optó por guardar silencio, consciente de que no era el momento adecuado para discutir.
Yu Tu:(con disgusto) —¿Por qué querías acabar con tu vida?
Shen Miao: (suspirando) —Sí, quería acabar con mi sufrimiento. Pero me arrepentí en el último momento. Antes, sentí como si alguien me empujara hacia el borde.
Yu Tu: (frunciendo el ceño) —¿Sentiste que alguien te empujaba?
Shen Miao: —Sí, no pude ver a nadie, pero sentí una presencia que me empujaba hacia el vacío.
Yu Tu se quedó en silencio, mientras sostenía las manos de Shen Miao y la guiaba hacia un lugar seguro. No podía dejar de pensar en las palabras de su padre. Algo no encajaba con lo que había leído en el libro de las almas, y eso lo inquietaba.
Shen Miao: (mirándolo con curiosidad) —Entonces, ¿qué sucede ahora? ¿Qué pasará conmigo?
Yu Tu observó a Shen Miao con disgusto y resignación. Si no fuera por la misión, la habría abandonado en el acto. Sin embargo, sabía que debía mantenerse cerca para cumplir con su deber.
Yu Tu: —Te llevaré a mi mansión. Necesito asegurarme de que estés a salvo. Ahí, te quedarás conmigo por un tiempo.
Shen Miao iba a protestar, pero el recuerdo de la presencia que sintió la hizo dudar. Decidió seguir a Yu Tu sin más quejas.
Cuando llegaron a la mansión de Yu Tu, Shen Miao se sorprendió al ver el esplendor del lugar. La mansión era opulenta, con decoración lujosa y detalles exquisitos que parecían de otro mundo.
Shen Miao: (admirando la mansión) —Tu mansión es realmente lujosa para ser un ángel arrogante.
Yu Tu frunció el ceño, claramente molesto por el comentario.
Yu Tu: (con tono cortante) —Me llamo Yu Tu. No te dirijas a mí con términos despectivos.
Shen Miao se sorprendió por la reacción, pero decidió no seguir discutiendo. Yu Tu la condujo a una elegante habitación de invitados.
Yu Tu: —Aquí es donde te quedarás. Estoy seguro de que encontrarás todo lo necesario.
Shen Miao se tumbó en la cama, exhausta, y comenzó a cerrar los ojos. Sin embargo, Yu Tu se sentó en un cómodo sillón cercano y la observó y le hizo una pregunta bien directa.
Yu Tu: —Dime, ¿por qué incendiaste el orfanato?
Shen Miao se quedó paralizada. La pregunta la dejó helada y la verdad es que no recordaba cómo había comenzado el incendio. Solo recordaba que se le culpaba, pero no tenía recuerdos claros de los eventos.
Shen Miao: (perturbada) —No estoy segura... Solo sé que me echaban la culpa, pero no recuerdo cómo empezó el incendio. Es como si no tuviera recuerdos claros de ese momento.
Yu Tu la observó pero recordo que tenia que hacer otra cosa.
Yu Tu: —Qué extraño. Quédate aquí. Volveré pronto.
Yu Tu salió de la habitación y se dirigió a su propia habitación. Allí, una estantería secreta se abrió, revelando una sala oculta llena de libros de almas flotantes. Yu Tu se acercó al libro de Shen Miao y notó algo inusual. Hace nueve años, durante la invasión del ser oscuro, algunos libros de almas habían sido alterados.
Yu Tu: (murmurando para sí mismo) —El libro de Shen Miao... antes estaba en blanco, pero ahora aparece con la historia del incendio. ¿Acaso alguien manipuló los libros de almas? ¿Fue el ser oscuro quien altero su pasado?
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La ultima misión del angel
FantasiaShen Miao, una enfermera joven y dedicada, ha pasado toda su vida cuidando de otros, pero el peso de un pasado lleno de dolor la ha llevado al borde de la desesperación. Una noche, consumida por la tristeza, decide que no puede seguir adelante y se...