Prologo

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"Veo que por fin has despertado".

Abriendo mis ojos me encontré  parado en un lugar extraño,    no había paredes o techo simplemente  era una especie de vacio negrusco con toques violetas   que se podía observar,  bajo mis pies había un líquido espeso  el cual tenía pequeñas  ondulaciones    de forma esponatenea.

Finalmente  mirando al frente mío encontré a un hombre esposado,  con grilletes apretando cada de sus extremidades,  las cadenas se alzaban hasta perderse de la vista.

"Deja de mirarme como si fuera una cosa del otro mundo"   dijo el hombre encadenado a lo cual asenti con mi cabeza.

"Uh,  lo siento por e-"  no pude terminar ya que el hombre hizo una mueca de desprecio.

"Escucha,  deja esa actitud  de mierda que tienes,  no tienes que actuar conmigo creando esa máscara  para ocultar a tu yo real,  así que tumba esa falsa actitud  y muéstrame como eres en verdad"   la voz del hombre fue sería sus ojos severos demostraba  que hablaba en serio.

"..."

Haciendo un silencio sepulcral  aquel joven cerró sus ojos antes de soltar un largo y profundo suspiro,  dejó caer sus hombros,  su cuerpo se relajo,  su sonrisa se desvaneció  hasta solo quedar una expresión  tranquila,   luego abrió sus ojos,   ojos de color marrones sin vida lleno de emociones ocultas.

"¿Como es que lo sabes?"  Pregunte serio,  nadie nunca había visto debajo de mi máscara psicológica,  me asegure  de eso.

"Ahora si nos entendemos,   pero para responder a tu pregunta,  te diré que te eh estado observando por bastante tiempo,  eh visto tu vida y sin duda fue interesante"  hablo el hombre mienstras  torcia su boca en forma de sonrisa.

"Vaya,  ahora tengo  un admirador  que bonito"  Dije con sarcasmo  "¿Supongo que debes ser Dios?"

"Si,  soy Dios   más espesificamente  soy un Dios del Caos,   existen muchos Dioses del Caos a lo largo y ancho del omniverso pero eso  no es importante  dime algo ¿quieres poder?"  Preguntó  el hombre.

Entrecerrando  mis ojos observe al Dios del caos encadenado,   no importa como lo mire era muy sospechoso, mi cuerpo y mi alma me decían peligro con este tipo.

"Si"  no se porque pero esa fue mi respuesta.

"Bien,  escucha,  dado que tu vida me ha divertido decidí darte un obsequio de reencarnar,   junto a ello te daré 5 deseos"  dijo el dios del caos  a lo cual levante una ceja.

"¿Que no sólo eran 3?"

"Se me da la gana darte 5 deseos eso es todo,   ¿Dime cuales son tus deseos?"  Sonrio el Dios.

Cerrando mis ojos por unos momentos pensé detenidamente  en mis deseos.

"¿Puedo pedir literalmente lo que quiera?" Pregunte.

"Si".

Con esa confirmación  sonrei y dije: "antes de eso puedo cambiar mi cuerpo".

"Si,  si puedes   pero esos será después de que pidas tu deseos"  hablo el dios.

"Bien   entiendo"  Dije con una sonrisa extraña formandoce en mi rostro "Como primer deseo,  quiero  todas habilidades  fisicas de Saitama"   pedí ya que esto era un punto clave para lo que vendría.

"Como segundo deseo,  quiero las habilidades  de Blast,  para abrir portales intermencionales  y pasar de una dimensión  o realidad a otra".

"Como tercer deseo,  quiero  la habilidad de copia perfecta,  la cual me permita copiar  cualquier habilidad  o poder a la perfección con solo un vistazo"

"Como cuarto  deseo,  quiero tener la inteligencia  de un Super genio,  a si como un gran intelecto  y memoria perfecta".

"Como quinto deseo,  quiero  la habilidad de  consumir otras habilidades  o seres y tomar sus poderes y habilidades  para mi mismo"   pedi mi último deseo.

Ante mis cinco deseos   el Dios maligno dio una tetrica  sonrisa en su rostro.

"Esos deseos son fáciles  para mi"  dijo el Dios mienstras  comenzaba a reír luego extendio  su mano a lo cual la extreche.

De inmediato  sentí como  algo entró en mi ser pero no le di importancia,  su esto era lo que yo queria   entonces no me importa.

"Bien esta hecho,  te he cumplido tus deseos,  pero déjame decirte que ese poder de copiar todo,  lo coloque como algo especial  que activas en tus ojos,  digamos como un sharingan o ojos del Señor de ese anime de dioses"  dijo el Dios maligno  a lo cual sonrei  de la misma forma que el dios.

Podía sentir como la emoción  comenzaba a llenar todo mi ser ante lo que haría en el futuro, mi sueño anhelado.

"Quiero modificar  mi cuerpo"  pedí a lo cual el dios maligno   chasqueo sus dedos donde aprecio un panel como un modelo 3d de un cuerpo humano,  a si mismo habían todo tipo de espesificiones para crearlo desde cero o simplemente  tomar un molde ya hecho.

Decidiendo no perder tanto tiempo elegí un molde ya hecho,  tras elegirlo como a darle lo detalles que deseaba.

La edad la deje entre los 20 a 23 años,   el físico seleccione un físico entrenado con músculos marcados y definidos,  sin que sean demasiado llamativos a simple vista.

Mi altura la deje en 180 cm de alto,   mi cabello el cual era crespo,  elegí uno liso al estilo anime algo rebortoso   mis ojos los dejé del mismo color el cual era marrón claro,  casi amarillos,  mi piel era blanca.

Finalmente  en cuanto a mis ropas era más sencillos,   opte por un traje,  este era una camiseta manga larga gris claro y gris oscuro,  pantalones del mismo color,   botas y guantes negros,  una capa negra  la cual poseia varios cortes en la misma,  y una capucha para cubrir mi rostro.

Al terminar  de editar mi cuerpo le di en guardar y luego aceptar donde mi ser brillo por un momento y al siguen  tenía la misma apariencia  que había creado.

"Ahora necesitas un nuevo nombre"  dijo el Dios del Caos a lo cual sonrei,  tenía el nombre perfecto.

"Apartir de ahora soy 'ELEIN'  " Dije mienstras  me colocaba la capucha,  elegí ese nombre ya que era mi nombre pero al revés,  además se escuchaba mas genial  de esa forma.

"Bien Elein,  ahora ¿aque mundo quieres ir?"  Preguntó  el Dios con una sonrisa.

"Enviame a One punch Man"   pedí a lo cual el Dios sonrio.

"Te estaré observándo,  para ver  que tanto interesante será tu nueva vida espero mucho de ti"  sonrio el Dios a lo cual no dije nada y simplemente  asenti con mi cabeza.

Esta seria mi nueva vida,   mi nueva vida donde sería yo mismo  sin tener que ocultar que clase de persona soy realmente.

Un portal  se abrio  donde  caí por el mismo,  unos momentos después   apareció una luz donde comenze a caer desde el cielo.

En ese mismo  espacio  el Dios Maligno  comenzó a reír de forma alegre y salvaje.

"¡Finalmente,   ha llegado el momento  señalado de esa profecía,  me pregunto  que harán esos llamados Dioses cuando se enteren de lo que tanto tenían  ha llegado!"  Río del Dios maligno   con burla y locura en su voz.

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