Capítulo 27: Nuevamente pegados

143 3 0
                                    

El sol apenas comenzaba a asomarse por la ventana cuando Jorge despertó con una sensación incómoda. Sentía una presión en su abdomen que pronto se transformó en una oleada de leche que comenzó a brotar de su cuerpo y pene, también le empezaron a salir uno pechos que crecían cada vez más. La situación era tan surrealista que no pudo evitar sentir una mezcla de incomodidad y confusión.

Sofía, al escuchar los sonidos y ver la situación, no pudo evitar sentirse excitada. La visión de Jorge en ese estado despertó en ella una mezcla de deseo y preocupación. Sin poder contenerse, se acercó a él, intentando aliviar la tensión que ambos sentían.

—Jorge, ¿estás bien? —preguntó Sofía, con la voz cargada de preocupación y deseo.

A medida que el embarazo de Jorge comenzó a desvanecerse, Sofía y Jorge se encontraron envueltos en una oleada de deseo y pasión.

La transformación en la que habían estado involucrados los había dejado con una necesidad intensa de conectarse el uno con el otro. Pronto, se encontraron en un momento de íntima conexión, que se transformó en un acto de pasión que parecía ser una liberación de todo lo que habían soportado.

Justo cuando llegaron al clímax, un nuevo hechizo de Lucía se activó. Sofía y Jorge, en medio de su éxtasis, sintieron una energía mágica que los envolvía. De repente, sus partes íntimas se pegaron de forma mágica y literal, quedando unidos por el resto del día.

 De repente, sus partes íntimas se pegaron de forma mágica y literal, quedando unidos por el resto del día

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El hechizo no tardó en hacer efecto y pronto, Sofía y Jorge se encontraron en una situación desesperante. Sus cuerpos estaban físicamente conectados de manera que cada movimiento se convertía en una lucha.

Durante la mañana, enfrentaron la dificultad de cambiarse. Ya que Jorge al tener su pene adentro de Sofía, sentía cada vez más placer cuando se movían.

El baño resultó ser otra prueba. Al intentar bañarse, la conexión entre ellos hizo que cualquier movimiento resultara en un enredo desafortunado. Cada intento de lavar sus cuerpos se volvía un desafío, ya que no podían separarse y cada gesto debía ser cuidadosamente coordinado y Sofia estaba completamente exilada por el placer que le daba Jorge con cada movimiento, haciendo que sus pezones esté duros.

Al cambiarse, Sofia se puso su sostén y una blusa mientras Jorge observaba, la parte complicada fueron los pantalones, que Jorge tuvo que dejar la cremallera de su pantalón abierta  al igual que Sofia con sus Shores. La ropa que se pusieron estaba estirada y ajustada en formas incómodas, lo que complicaba aún más su situación.

A lo largo del día, la conexión entre Sofía y Jorge se convirtió en una fuente constante de frustración. Cada intento de moverse, sentarse o realizar actividades cotidianas requería una colaboración precisa. A veces, uno de ellos tenía que realizar movimientos mínimos para evitar dolor o incomodidad en el otro.

Ese día decidieron no ir a la universidad para evitar una situación más incómoda de la que había sentido  A pesar de la situación incómoda, Sofía y Jorge intentaron mantenerse positivos. Además de que Sofia no paraba de sentirse evitada, cualquier movimiento que Jorge realizara, era satisfactorio para ella.

Cuando llegó la noche, se encontraron exhaustos y con una profunda necesidad de descanso. Sabían que el hechizo debía durar hasta el final del día, y que el alivio solo llegaría cuando Lucía decidiera levantar la maldición.

Mientras intentaban acomodarse en la cama, enfrentaron el desafío final del día. La conexión mágica que los mantenía unidos requería paciencia y comprensión mutua. Ambos sabían que, a pesar de la dificultad, debían mantenerse unidos para superar el castigo.

Finalmente, la noche llegó con un sueño reparador para ambos. Aunque la situación era desesperante, Sofía y Jorge encontraron consuelo en su conexión y en la esperanza de que Lucía pronto terminara con la prueba que les había impuesto.

EL CASTIGO DEL INFIELDonde viven las historias. Descúbrelo ahora