Ella siempre me entiende [Kivi]

Capítulo 9: Desnúdame

Sant Martí, Barcelona
Mayo del 2028

Violeta salió de su piso ya superada, hacia casi una hora que había salido del curro y tan solo pasaba un cuarto de hora de las 12 de la mañana.

Con agilidad subió el tramo de escaleras que separaban el cuarto del quinto piso y nada más llegar arriba a sus oídos llegó sin problema la música que Chiara tenía puesta a todo volumen.

Temió porque su vecina no oyera el timbre al tener la música tan alta, pero no fue así, una Chiara sonriente no tardó nada en abrir la puerta de su casa.

-Hola Vivi.

-¿Me ayudas porfa?

-¿Que necesitas? -Le preguntó la menorquina dejándola pasar al interior de su piso.

-Que me desnudes. -Respondió tan tranquila Violeta dejando a Chiara completamente estática y atónita ante la respuesta de su amiga. -A ver no, o sea, me explico.

-Explícate. -Le pidió la pelinegra aun boquiabierta.

-Que esta mañana en el trabajo cuando me han puesto el micro no sé que coño han hecho que me han atascado la cremallera, y llevo más de un cuarto de hora intentando quitarme el vestido que parezco tonta.

-Anda ven. -Dijo la menorquina comprendiendo ya la situación. -A ver cómo llevas la cremallera.

Violeta obediente se acercó hasta su amiga poniéndose de espaldas a ella para así facilitarle el acceso a la cremallera de su vestido.

Al instante notó las suaves manos de Chiara tocar su espalda y un escalofrío la recorrió entera.

Notó como la chica intentaba desatascar la cremallera, que seguramente estaría incluso más atascada después de sus tantos intentos a ciegas.

-Joder Vio, está atascadísima.

-¿Mucho?

-Muchísimo, no sé qué coño has hecho.

-Aún me tocará cortar el vestido para podérmelo sacar. -Dijo la granadina frustrada al notar a Chiara tirar más fuerte de la cremallera intentando bajarla.

-No seas exagerada, que yo esto te lo quito ya verás.

-Bueno aún tengo rato hasta tener que ir a por Luca al cole. -Violeta miró su reloj cerciorándose que aún tenía más de una hora para desatascar la dichosa cremallera y no llegar tarde al colegio para recoger a su hijo.

Chiara siguió intentando bajar la maldita cremallera con sumo cuidado para no romper el vestido de su amiga.

Intentos en vano, la cremallera seguía igual y ella se estaba empezando a desesperar.

-Fuck shit. -Dijo separándose ligeramente de la pelirroja.

-¿Qué pasa?

-Que no puedo, me estoy estresando. -Respondió la menorquina quitándose la sudadera y quedando únicamente con un pequeño top que parecía más un sujetador. -Me estoy hasta acalorando.

Violeta trago saliva al ver el torso semidesnudo de su amiga, su piel se veía tan perfecta, suave y delicada, y sus curvas parecían esculpidas por el mismísimo Miguel Ángel.

Pero ya la guinda del pastel eran sus pechos, eran inmejorables, tanto es así que no pudo evitar no dirigir su mirada a ellos más del tiempo debido.

-Mírame a la cara ¿no? -Dijo Chiara sacando a la pelirroja de su ensimismamiento.

-Perdón.

-Anda date la vuelta que siga, que esto tiene que bajar si o si.

Violeta obediente se volvió a dar la vuelta dándole la espalda a su amiga que continuó con su labor de seguir intentando bajarle la cremallera.