Despierto
y la ausencia
tuya
por momentos
palpita como un corazón fúnebre
que se regodea en la herida.
Despierto y la gran ciudad
en su oscuridad
brilla
sin astros que la acompañen.
Sonámbula la noche,
baila descalza sobre la calle.
La luz de los rascacielos y automóbiles
apaga el firmamento nocturno,
lo tilda de fulgor inecesario.
Despierto y tu recuerdo
es un pálpito
difuso e insonorizado-.
Un eco
que jamás responde
y convierte mi nombre
en abismo.
Despierto
y la noticia lejana de tu ausencia
siempre presente ,por momentos,
opaca mi nombre
y lo vuelve contaminación lumínica.