Capítulo 23

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El primer acto oficial como princesa superó todas las expectativas con los ciudadanos que había en el gabinete de prensa de la Casa Real. La querían todos. Cautivó el corazón de todo el reino con su cercanía, carisma y amabilidad teniendo una habilidad para atraer y conectar inmediatamente. El público y los medios de comunicación la recibieron con entusiasmo y admiración, había sido un completo éxito su inauguración de la nueva sala del Museo de Arte Contemporáneo. Apple debería sentirse optimista y animada por la recepción positiva y el potencial de su rol como Princesa de Lorh am Main, sin embargo, la tensión y silencio que hubo con su madre mientras volvieron al Palacio solamente la hizo sentirse triste y sola sin unas palabras de apoyo y afecto por parte de Blancanieves. No pudo disfrutar de su éxito personal cuando sintió que no era lo suficientemente buena para el papel ante la falta de aprobación materna. Aun cuando recibió elogios y felicitaciones de todos sus amigos, sirvientes y Milo que vieron su debut por televisión o al día siguiente cuando su rostro estaba en portadas de periódicos y revistas.

"Princesa no le tome más importancia de la que merece, usted lo ha hecho increíble ayer. Su padre sí que está orgulloso de usted" Le decía con total seguridad Paul.

Aquellas bonitas palabras la hicieron sonreír un poco mientras estaban en la Capilla Real limpiando y cambiando por flores nuevas la tumba del rey fallecido. Oh, si su padre estuviera aquí, él si le daría su aprobación paternal ante su comienzo como miembro activo real. Le imaginaba sonriéndola con satisfacción sincera como cuando tenía cinco años y le bailaba ballet, pues a él le encantaba que ella bailara. Estaba segura de que, si estuviera, le ofrecería ahora mismo sus amables palabras y cálidos abrazos que tanto necesitaba a veces cuando su madre era verdaderamente indiferente con lo que quería o necesitaba ella.

"Se parece totalmente a él en personalidad, tan empática y cercana con el público, con sensibilidad y resiliencia" Le siguió intentando animar.

"Gracias Paul" Agradeció enormemente, pues era un completo cumplido que le dijeran que era idéntica a su querido padre en personalidad. Amaba saber por los ciudadanos o los medios que los comparaban, que en el reino todavía permanecía el legado del príncipe consorte como seguía en su corazón. Era un halago inmenso saber que no era su fría y distante madre.

Y aun así sabiendo como era Blancanieves, quería su figura materna protectora para que la apoyara, la animara y le dijera: "bien hecho" o "eso podría haber estado mejor" después de cada acto institucional que realizaba. Sin embargo, no recibía nada de eso por parte de ella. La reina solamente mostraba su indiferencia, mientras los celos y envidias la carcomían por dentro. Pues cada día, Apple recibía más atención pública y mediática en cada conferencia, visita local, evento diplomático... al que asistían juntas. La prensa se centraba únicamente en la princesa y ella quedaba en un papel secundario. Todo el mundo solamente iba a ver a la princesa, debía escuchar cómo decían cuando iban en el coche que se habían confundido de lado porque no querían ver a la reina. Tenía que ver las sonrisas que le dedicaban, escuchar los gritos de los ciudadanos halagando su juventud y belleza... Herían terriblemente su orgullo y la ponía muy celosa ser totalmente opacada. Blancanieves se sentía muy amenazada por su hija, comenzando a pensar que quería quitarle todo lo que había logrado y la imagen que había construido a lo largo de los años.

Para su irritación todavía más, su examante intermitente, el primer ministro estaba más que contentó con la incipiente gran popularidad de la princesa y en su cita semanal de los miércoles no dudo en mostrar su felicidad ante su estrategia política de distraer el descontento popular del gobierno.

"¡Es excelente! ¡Qué fotos! Es simplemente perfecta en cada aparición pública en la que aparece, tiene tanto encanto que es un arte. La reacción de la prensa es extraordinaria, solo mírala, la alaban en todas las portadas de los periódicos y revistas nacionales e incluso internacionalmente. La adoran por completo" Hablaba el Primer Ministro mientras analizaba las primeras páginas del periódico Nacional, donde había imágenes de la princesa y grandes titulares halagando lo guapa que era.

𝙳𝚒𝚎𝚌𝚒𝚜𝚒𝚎𝚝𝚎 𝚊ñ𝚘𝚜Donde viven las historias. Descúbrelo ahora