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La nieve se había ido, con ella los Moon de su casa, ahora que se levantaba para ir a la escuela, no estaba Sanha apurándole, ni Bin mirándole desde el sofá, solo se encontraba Hyuk desayunando sin prestarle atención como todos los días mientras sus padres conversaban de temas que a él le aburrían.

—Ya me voy, me iré con Sanha a la escuela y después tengo la clase de piano así que llegaré un poco tarde. — dijo el Omega tomando sus cosas ante la mirada de Hyuk.

Ellos siempre se iban juntos, independientemente de lo peleados que estuviera, Dongmin jamás se iba solo y menos con Sanha , pero tampoco es como que fuese a seguirlo para comprobar que si es Sanha con quien se irá y no algún Alfa imbécil que le guste.

—Me iré contigo. — dijo levantándose el mayor.

—¿Para que yo termine como el mal tercio entre Sanha y tú? No gracias, mejor vete con Bin a la Universidad.

Dicho eso salió del comedor. La verdadera razón para no querer que su hermano vaya con ellos no es aquello que dijo, sino que le prometió a Sanha contarle lo que había pasado con el Alfa en su habitación. Como es que terminó todo despeinado y sin aliento cuando bajó por un poco de jugo y galletas. Su hermano se había quedado dormido en las piernas de Sanha, pero su amigo no y le insistió tanto que Dongmin quedó harto y prometió contarle el día que regresarán a clases.

Ahora, aquí estaban. Caminando al colegio por primera vez en muchos años. Sanha parece un niño pequeño esperando una sorpresa, dando leves brinquitos y sonriendo tan grande como podía. Mientras que Dongmin se moría de nervios de solo pensar en contar lo que había pasado.

Es que, había pasado algo vergonzoso con él, demasiado bochornoso como para querer decirlo. Y aún así, Sanha le insistía por detalles.

—Entonces... — empezó Moon Sanha sonriendo. Dongmin sintió las mejillas rojas y calientes. — ¿por qué bajaste despeinado el día de tu cumpleaños? Y no me digas que por dormir porque claramente no te creo.

—Bueno no. — respondió algo tímido. — En realidad tu hermano y yo, bueno es que mi Omega es demasiado sumiso a veces con él y solo quiere hacer todo lo que le dice y... — miró a Sanha que esperaba sonriente una respuesta. Dongmin respiro sintiéndose más tímido ahora. — bueno, nos besamos un poco.

—¡¿En serio?! — grito el Omega de cabellos platinados haciendo que Dongmin se sienta más pequeño de lo que en realidad es. Sanha no puede evitar la felicidad y sus feromonas lo afirman con bastante fuerza.

Dongmin sólo ve aún Omega volviéndose loco mientras lo abraza y le dice "cuñado" repetidas veces. Dongmin odia esa palabra. Dongmin, en realidad odia muchas cosas, sobre todo a Moon Bin.

Y aunque pasó algo más ese día en su habitación, se dijo que eso debía ser un secreto entre el Alfa y él, que nadie más debía saber. No porque tuviese miedo, sino porque le daba vergüenza decir que se había corrido en sus pantalones de solo sentir los roces del mayor contra él.

Era muy vergonzoso. Dios.

El Alfa que odio, ¿es mi Alfa?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora