26/05/2022
Monte-Carlo, MónacoUno de los fines de semana más esperados en la Fórmula 1 había llegado, el Gran Premio de Mónaco estaba aquí. El derroche de moda, dinero y lujo se hace presente como cada año.
Hoy era día de prensa, por lo que para mi era el día más tranquilo de todo el fin de semana.
Dante me había acompañado hasta el bote por dónde cruzaría para poder llegar al circuito, no tenía caso que me acompañara hoy, estaría encerrada en la oficina discutiendo las mejores estrategias para la clasificación ya que en las carreras callejeras el día sábado lo es todo, especialmente aquí en Mónaco.
— Me parece irreal estar aquí — expresé en el bote.
— Has pasado mucho tiempo fuera, es normal, espero que este tiempo te sirva para reconciliarte con este país.
— Seguramente si papá.
El aire hizo que mi cabello volara y volara, cuando paramos de navegar parecía que tenía un nido de pájaros ahí arriba, las risas de mi padre fueron inevitables y mi mirada ofendida también lo fue. Así que lo acomodé y posteriormente me ayudó a bajar para entrar al paddock.
La estrecha calle estaba llenísima de invitados y personas que trabajan para las escuderías, era casi imposible transitar por ahí. Mi papá tomó mi mano y juntos nos escabullimos entre toda la gente para llegar a Mercedes. Antes me desvié a McLaren donde vi y saludé a Daniel.
— ¿Y Alaia? — con esa pregunta me recibió el australiano.
— Se quedó en casa, es imposible traerla con la cantidad de gente que hay aquí. Casi muero aplastada allá atrás.
— ¿La traerás alguno de estos días?
— Claro pero hoy sería un día muy aburrido, ya sabes los carritos no ruedan en la pista hoy — sonreí recordando a mi hija.
— La extraño.
— Ella también extraña los dulces que le regalas — me crucé de brazos y rodeé los ojos.
— Tengo un montón ahí adentro, cuando venga la traeré para que escoja. Por cierto, Pierre está organizando algo esta noche ¿te apuntas? — asentí.
— Le escribo más tarde para que me de los detalles. Debo irme hay mucho tráfico en el paddock.
Abandoné McLaren y continué mi camino hasta el equipo de la estrella. Saludé alegremente y seguí caminando hasta llegar a la sala de juntas.
Me ubiqué en mi lugar y puse atención a lo que todos tenían que decir, también expresé mis ideas y luego determinamos la estrategia que aplicaríamos el sábado y la forma en el saldríamos a probar nuestro coche en las tres prácticas libres.
La noche cayó y ahora nos encontrábamos llegando al muelle, aún faltaba un largo camino a casa. Y posteriormente prepararme para salir con mis amigos, como antes.
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Él lo tiene todo | F1
FanfictionDespués de un año y medio, el regreso más esperado estaba por llegar. Angie tenía sentimientos encontrados, pero pensaba que todo podía salir bien. En cambio, Charles no tiene ni idea que el gran amor de su vida tiene grandes sorpresas. Mientras el...