71- Despertar siniestro

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Estaban muy cerca de llegar a la capital del imperio de Britania, hasta que comenzó el alba.

—Está bien, podemos llegar por el día si nos dejan por aquí, ya se puede ver la capital desde acá.

Comentó Elliot mientras observaba como se acercaban al lugar mientras el sol ya estaba comenzando a asomarse, iba a ser problemático si los ciudadanos los veían, pero esta vez Eli no se estaba deteniendo a pesar de las advertencias de Elliot.

Sus ojos estaban fijos en ese lugar, a lo lejos, podía verse el castillo, mientras que, en una zona más alejada del castillo, lograba verse el gran templo, el cuál se veía tan grande como el castillo.

—¡Elizabeth!

Al escuchar su nombre, Eli volvió a su forma original inmediatamente, haciendo que tanto ella, como Elliot y Daniel terminaran cayendo y rodando por el suelo, ninguno alcanzó a salir ileso, ya que la velocidad a la que avanzaban era demasiado alta y la transformación repentina hizo que terminaran rodando por el suelo.

Lewis fue hacia ellos inmediatamente, una vez en donde Eli, volvió a su forma humana. Habían caído por un camino marcado, por lo que otras casas no se vieron afectados por el accidente.

—¿Estás bien Eli?

Preguntó Lewis preocupado por el estado de Eli, Elliot y Daniel se pusieron de pie con dificultad, ambos habían caído tan bruscamente, que tuvieron algunas fracturas.

Gracias al poder divino de Elliot, ambos pudieron curarse, aunque como era una fractura, tardaron cerca de media hora en poder tener sus huesos y tejidos internos en óptimas condiciones.

Luego Elliot observó a Eli, quién estaba interactuando con Lewis, Elliot pudo notar que el maná de Eli no estaba en buenas condiciones, estaba alterado y aunque tenía la pulsera, parecía rugir como una bestia.

—Eli, si es muy duro para ti, ¿Qué tal si te quedas en una posada cerca de aquí y evitas llegar a la capital?

Preguntó Erick, mientras observaba a Eli hiperventilar. Jess estaba casi aterrada desde más atrás, aunque siempre veía intenciones asesinas en Eli, esta vez su presencia era mucho mayor.

Mientras observaba desde esa distancia, Jess colocó su mano sobre el bolsillo de su pantalón, recordó lo que Eli le había dicho, pero Eli seguía en sus cabales en ese momento.

—Está bien... me quedaré por aquí...

Contestó mientras se colocaba la mano en la garganta. Luego fue hacia Lewis y le estiró su mano hacia él, la mano que tenía la pulsera. Lewis tomó su mano y comenzó a inyectar parte de su poder en la pulsera, comenzando a reprimir al máximo el poder de Eli, lo que hizo que ella se desmayara.

Al hacerlo, Erick se acordó de lo que sucedió antes, casi en pánico sacó un abrigo de su maleta y se la comenzó a colocar a Elizabeth, aunque ella ya tenía ropa.

—¿Qué haces?

Preguntó Daniel confundido por las acciones de Erick.

—No preguntes nada, solo es necesario.

Respondió nervioso. Ya que estaban en una zona semi urbana, pudieron encontrar cerca una posada en donde dejarla. Pudieron llevarla a una habitación y la dejaron descansar, todos se veían preocupados por ella.

Mientras Erick la observaba, pensó en la carga mental que significaba para ella estar en ese lugar.

—Me quedaré con ella, no podemos dejarla sola.

Luego observó a Elliot, quién parecía verse frustrado, mientras no le quitaba los ojos de encima a Elizabeth.

Después Jess volteó su mirada hacia Elliot.

El camino de un héroeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora