Satoru x TN | La paradoja de la muerte

Capítulo I: La misión

Desde que tengo memoria el mundo me ha dado su peor mirada, mis padres fueron asesinados por un sicario cuando yo tenía la edad de 5 años, al ser unas personas adineradas heredé toda su fortuna, tenía una ama de llaves que se hizo cargo de mi crianza y desde los 5 años comencé a matar.
iniciando mi carrera con el sicario que asesinó a mis padres, desde ese día comencé a entrenar.

Ya veinte años han pasado desde ese día, me transforme en la mejor asesina de Japón, no tan solo la más cotizada si no que también la más costosa, dependiendo del objetivo es lo que cobro y claramente la forma del asesinato, los envenenamientos eran más costosos de realizar y lo mejor es que no dejaba rastro alguno. De una forma constante me asechaba la imagen del asesinato de mis padres, algo completamente irónico luego de dedicarme a asesinar personas, aparte de mi vida como sicaria, mi vida "normal" era bastante común, saque un título universitario en medicina especializandome en cardiología, mi vida era muy ocupada en cuanto al doble trabajo y muy pocas ocasiones me daba el tiempo para salir.

Un día normal en el centro médico llega una de mis colegas y se posa en el marco de la puerta de mi oficina.

Tengo planeada una noche de fiesta ¿Vamos? —Me miró de reojo sacándose el fonendo de los oídos, suspiré y con mi dedo anular moví hacia arriba mis lentes  acercándolos a mis ojos.

No puedo, hoy tengo un cliente que estoy viendo de forma personal, pero si me desocupo antes te busco ¿Ok?  —Mi colega no parecía estar muy feliz con mi respuesta y a regañadientes me dejó en una nota la dirección del lugar donde estaría.  Al finalizar la jornada laboral me dirigí a mi hogar, al subir al vehículo llegó una notificación al celular, un cliente deseaba hablarme para un trabajo al ver la cifra abrí mis ojos 16.016.300.000.000.000  yenes, era muchísimo más del patrimonio de mis padres multiplicado por 100, claramente aceptaría la oferta sin antes hablar con el cliente, me dirigí a la ubicación que era una cafetería, al entrar me pude percatar de un tipo extraño vestido como sacerdote, con una extraña cicatriz en la frente, analicé a todos los que estaban en el lugar acercándome directamente hacia el sentándome en frente.

¡Vaya! Si que eres eficiente y rápida —sonreí al verlo de cerca, era un hombre aproximadamente de unos 28 años llevaba unos aros de color negro  y su cabello era largo y sedoso, la camarera se acercó a nosotros y nos entregó una carta, al ojearla me pedí un mocaccino y el solo agua, volví mi mirada a su rostro sonriente.

¿Por que ofreciste una cantidad tan grande? —Levanté la ceja esperando y analizando todo tipo de respuesta, el continúo con su sonrisa y con un tono amable.

Creo que  antes debes responderme algo ¿Ves algo más en esta cafetería? — Mi rostro demostró confusión ante su pregunta, observé a mi alrededor y no podía ver absolutamente nada, solo personas disfrutando de su comida.

¿Por qué dices eso? Solo te veo a ti y a todas estas personas comiendo — Colocó su mano izquierda en su mentón de forma pensativa mientras me miraba. 

¡CLARAMENTE! Eres perfecta para esto. —Sonrió nuevamente entregándome un sobre, lo tomé con mi mano arrastrándolo por la mesa, al abrirlo pude ver parte del dinero por adelantado, con un papel con un nombre escrito "Satoru Gojo".

¿Este es el objetivo? —Pregunté confusa, normalmente me entregaban una fotografía, esta vez solo fue el nombre, y ni siquiera me dio más información.

Tienes un año, no me interesa la forma en que lo hagas, solo espero que sea llamativo y de forma peculiar —él se acercó y comenzó a hablarme sobre el objetivo, en ningún momento me informó como era él fisicamente, sólo me habló de que era un hombre peligroso, que era astuto y que tenía muchas formas de safarse de las situaciones peligrosas, así que analizando debía ganarme su confianza.