Olor a humedad.

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y me hubiera gustado tanto estar atrapada entre las hojas de su cuaderno polvoriento, con la humedad haciendo destrozos en la corteza, quebrando a personas a las que le quitó el nombre y dejó moribundos debajo de su ropa, por encima de sus pantys de encaje.

Tienes a tu disposición mi carne, por si olvidas mis ojos y recuerdas otros, si al sentirme cerca anhelas a alguien más, seré yo quien esté frente tuyo.

Corrompe lo que quede de mí, tritura mis sobras en tus ásperas palmas, hasta convertirme en polvo, hasta que mis entrañas cuelguen en tus brazos y añoren el calor humano, aferrándose intensamente a ti.

Seré la tinta que necesitas si alguna vez decides tenerme presa en la cárcel de tu pequeño libro viejo. 

Crónicas de un corazón afligido.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora